Nieto del impresor de los comunicados clandestinos de los hermanos Flores Magón, Ramón Vázquez, director de Ediciones Axolotl y de la Galería Ajolote, habla de las ventajas de la reproducción múltiple de obra gráfica y plástica de importantes artistas jaliscienses, del país y hasta del extranjero.
Quien esto piensa de la gráfica, José Ramón Vázquez, nacido en Guadalajara en 1962, lo hace por razones históricas, afectivas e incluso de parentesco en su relación con los mecanismos de reproducción múltiple. Su tío abuelo, Nicolás T. Bernal, trabajaba para los Talleres Gráficos de la Nación y desde ahí clandestinamente mantuvo el compromiso de imprimir los comunicados de los hermanos Flores Magón cuando fueron encarcelados y llevados a San Diego, California.
Ramón también opina que la gráfica es una herramienta subversiva porque es un caballo de batalla para la expresión y difusión de la obra plástica, reproduciendo el lenguaje de los artistas aplicado a las técnicas serigráficas, logrando de este modo múltiples que se convierten en obra asequible de gran calidad técnica y riqueza cromática.
Entró en contacto con la serigrafía comercial siendo aprendiz en el taller de un amigo de su padre. Pronto empezó, para ganar dinero, a hacer calcomanías, camisetas y carteles para conciertos como el de los últimos dados por la banda El Personal en el Iteso, de obras de teatro experimentales en la UdG, o de uno de los primeros cortos experimentales de Guillermo del Toro, La Lupe, realizado en 1984.
Admirador de las bellas artes desde temprana edad, y en especial de la producción plástica tapatía, Vázquez practicaba un incipiente coleccionismo que lo llevó, en 1987, a adquirir una gráfica de Benito Zamora, artista que lo conminó a que usara sus conocimientos de impresión para aplicarlos a la reproducción de serigrafías de autor de alta calidad técnica.
En 1992 produce en su taller el cartel para la exposición individual de Zamora en la galería Matiz dirigida por Paco Barreda. El 12 de diciembre de 1996 inaugura la galería Ajolote Arte Contemporáneo, situada en la colonia Chapalita y al frente de las instalaciones del taller, con una exposición colectiva en la que se exhibe la gráfica producida ahí por artistas como Zamora, Carlos Rodal, Gabriel Mariscal, Miguel Ángel López o Roberto Pulido.
José Ramón Vázquez cuenta al respecto: “Me considero más un editor que un galerista, pero abrir la galería era una consecuencia lógica de la dinámica de producción del taller, que pedía un lugar de exhibición. Se dieron las circunstancias y me quedé con el espacio que antes era otro comercio. Tuve que abrir una puerta que uniera el taller con la galería, y empecé a organizar periódicamente exposiciones, con gráfica del taller y colectivas e individuales de pintura de artistas cercanos a Ediciones Axolotl, ya sean locales o amigos extranjeros itinerantes”.
Galerista por circunstancias, lo cierto es que por la Galería Ajolote han transcurrido un buen número de personajes en una sucesión de eventos memorables. Ahí se presentaron en 1997 las revistas Moho, dirigida por Guillermo Fadanelli, y La Pus moderna, dirigida por Rogelio Villarreal, en el marco de la inauguración de una exposición individual de pintura a cargo de Enrique Oroz, Aceitosa adrenalina. En 2002 se exhibió Frántica, una colectiva de fotografía y en 2005 la instalación de la japonesa Sae Otomo. También un artista emblemático en la ciudad como el recientemente fallecido Kraeppelin expuso ahí. Las subastas que cada temporada realiza Ajolote Arte Contemporáneo se han convertido en una referencia obligada para artistas y coleccionistas.
Entre los artistas que exhiben regularmente en Ajolote Arte Contemporáneo se cuenta la vieja guardia compuesta por Ernesto Flores, Gabriel Mariscal, Benito Zamora, Alejandro Colunga, Tafoya, Manuel Ramírez, Juan Zufiaur o el escultor Luis Espiridión, así como jóvenes como Roberto y Balo Pulido, Toño Camuñas, Miguel Vega, Violeta Esparza, además de creaciones experimentales de artistas como Erándini Aparicio, vocalista de Sepulcro Bohemio.
Abocado Ramón Vázquez al taller de serigrafía de manera total, en la actualidad Ediciones Axolotl comienza una etapa en la que se pretende que el taller sea autofinanciable para poder seguir con sus actividades de producción e impresión de ediciones.
Las calcomanías, a las que Ramón Vázquez les tiene particular afecto porque con ellas empezó su andadura de impresor, van a tener un papel importante en la difusión del trabajo de varios artistas entre las generaciones más jóvenes. También se va a potenciar ese aspecto con una línea de camisetas serigrafiadas con obra de diferentes artistas. José Ramón Vázquez se muestra entusiasta al respecto: “Es nuestra oportunidad de llegar a un público joven, de forjar su educación visual con el arte local como referencia y no con los refritos visuales que nos impone esta era en exceso televisiva, plana, atonal”. ®
cheke
esta muy bueno el articulo, creo que en mi pais faltan muchos mas sitios asi, sobre todos en regiones. saludos desde puerto montt chile