El fenómeno del futbol no tiene un precedente en la historia. A pesar de que la industria del entretenimiento (en general) se ha sobrevalorado, el juego cuenta con características distintivas que demandan su estudio, sobre todo tomando en cuenta el crecimiento que ha tenido en las últimas décadas. Recientemente, el Real Madrid pagó dieciséis millones de euros sólo por rescindir el contrato de José Mourinho con el Inter de Milán. En los setenta, el salario máximo que podía obtener un jugador de la NHL era de siete mil dólares y en la NBA era ilegal gastar más de cuatro millones para todo el equipo. En todos los medios la cobertura de los deportes abarca una parte significativa de su espacio, hace treinta años sólo podíamos ver a jugadores como Alfredo Di Stefano o Bobby Charlton en el Mundial. En la televisión por cable existen seis canales dedicados exclusivamente a cubrir el deporte, hace veinte años no había uno. David Beckham, jugador de la Major League Soccer, ganará cuarenta y dos millones de dólares en 2010, Pelé no llegó a los tres millones en 1975.
El caso del deporte es particular, distinto al del cine, la música o los videojuegos porque su injerencia en las diversas culturas y sociedades ha sido poco tratado. El tema no hubiera tenido tanto interés hace cuarenta años porque no abarcaba tantas dimensiones. Aunque el estudio de las artes, la ciencia o la política ha sido limitada, la información y el análisis que se transmite en los medios sobre el futbol es casi, en su totalidad, infame. Nosotros deseamos saber qué nos puede decir la antropología, la sociología, la literatura, la economía, la filosofía y el periodismo inteligente, crítico, consciente, sobre el futbol.
En Replicante encontrarás una lectura divergente del balompié y el Mundial Sudáfrica 2010 a la que ofrecen los medios masivos. ¿Qué papel ha tenido el futbol en la conformación de identidades? ¿Qué registro han hecho la literatura, el cine y el cómic al respecto? ¿Quiénes son los protagonistas del deporte hoy? ¿Cómo funciona la mercadotecnia? ¿Cuántos millones al año produce el balompié mexicano? ¿Por qué detestar el juego? ¿Quiénes juegan en el “otro Mundial” y por qué? ¿Cuál fue su relación con el fascismo? ¿Qué papel asumen las mujeres que no gustan del futbol durante el mundial? ¿Quiénes han sido los grandes narradores y comentaristas? ¿Cómo han evolucionado los videojuegos en los últimos veinte años? Aquí tratamos de dar respuesta a esas preguntas, además tendremos actualizaciones diarias durante el Mundial. Por eso El lado oscuro del balón, entendiendo que oscuro alude a lo oculto, lo misterioso, lo desconocido.
El futbol puede interesarnos o no, pero decir que el tema es intrascendente es un juicio ligero, tomando en cuenta lo mucho que todavía nos falta entender en torno a este fenómeno. Si la sociedad lo ha valorado en una cifra intranscriptible de dólares, sin que a nadie le pusieran una pistola en la cabeza, lo menos que podemos hacer, como revista cultural, es analizarlo en sus justas proporcione$. ®