El Jueves, la revista humorística española que salía los miércoles y después los viernes, tiene un historial que envidiarían los grupos más subversivos del planeta. Sus bromas a la monarquía le han valido secuestros de ejemplares y fuertes ataques del conservadurismo más rancio. Pero El Jueves continua su brega semana a semana.
José Luis Martín Zabala fue uno de los miembros fundadores de la revista española El Jueves en 1977, para la que realiza desde entonces la serie El Dios, una pieza que le ha costado varios juicios por “ultrajes” a la religión católica, aunque ha sido absuelto en todos ellos.En 1980 creó Quico, el Progre para El Periódico de Catalunya, que también se publicó en JAuJa. En 1982 adquirió la revista El Jueves, junto a Gin y Óscar, constituyendo el sello Ediciones El Jueves, S.A. Aquí, una breve charla con él.
—La revista nació en 1977 y sois los únicos supervivientes de aquella época del boom del cómic: ¿os notáis un poco dinosaurios o lo lleváis bien?
—Lo llevamos bastante bien. En la revista hay gente como yo desde el año 1977 y sí, somos los diplodocus de la redacción, pero también hay gente de 25 a treinta años que aportan su obra de manera desacomplejada, como debe ser. La mezcla es muy estimulante y hace que sigamos en el kiosco y no en el cementerio de los elefantes, perdón, diplodocus.
—Vuestra mascota es un bufón desnudo pero, quizás ahora más que nunca, a quien os gusta desnudar es al rey (Borbón y cuenta nueva): ¿existiría El Jueves sin monarquía o os quedaríais muy huérfanos sin los Borbones?
—La monarquía no ha sido “tema” hasta hace muy poco. El Jueves, desde luego, tocaba el tema pero no era algo que tuviera repercusión más allá de nuestros lectores. Es desde hace unos diez años, cuando la casa real aceptó plebeyos en sus filas, que el tema se les ha ido complicando. Y sí, ahora a cada cosa que les pasa la gente quiere saber qué hará El Jueves. En el fondo, les tenemos cariño, gracias a ellos y sus estupideces podemos alimentar a nuestros hijos.
—Se os “acusaba”, al nacer, de que rompíais tabúes y hablábais con el lenguaje de la calle: ¿os queda algún tabú por romper? ¿Seguís con ese mismo lenguaje?
—Unas veces lo conseguimos y otras no, pero lo procuramos y eso es que nos reconocen los lectores. En todo caso, tampoco se trata de que nos demos más importancia de la que tenemos, sólo somos dibujantes humoristas.
—Antes érais “la revista que sale los viernes” y al poco “la revista que sale los miércoles”. Tal y como se está poniendo vuestro amigo Mariano Rajoy con los consejos de ministros de los viernes, ¿no era mejor que volviéseis a la idea original para compensar la mala leche que se genera en este país ese día?
—Ja, ja, no es mala idea. Sí, desde luego los viernes se han convertido en el día de las sorpresas desagradables pero nosotros cerramos los lunes, así que nos da tiempo de recoger sus últimas idioteces.
—Por vuestras páginas han pasado muchos colaboradores, de todas las partes de España: ¿creéis que hay un humor específico según donde se nazca o el humor sólo requiere de inteligencia para funcionar?
—Personalmente pienso que no, odio hablar de humor catalán, andaluz o gallego. El humor se divide en dos: el bueno y el malo. Y nosotros procuramos hacer del primero, repito, procuramos.
—Os han secuestrado números, os han llamado incluso nazis y condenado por “faltarle” a la monarquía: ¿eso os anima u os cabrea? ¿No os subleva que la misma Audiencia Nacional que “pasa” de condenar a los responsables de los crímenes del franquismo os condene a vosotros por “faltar” al hijo de un rey que puso Franco?
—Nosotros sólo trabajamos para nuestros lectores, las opiniones de los demás, incluidas la de los jueces o los portavoces de la prensa reaccionaria nos importan bastante poco. Afortunadamente siempre hemos dependido de nosotros mismos y hemos podido trabajar en libertad, así que “ladran, luego cabalgamos”.
«La monarquía no ha sido “tema” hasta hace muy poco. El Jueves, desde luego, tocaba el tema pero no era algo que tuviera repercusión más allá de nuestros lectores. Es desde hace unos diez años, cuando la casa real aceptó plebeyos en sus filas, que el tema se les ha ido complicando».
—Se dice que con lo de las caricaturas de Mahoma os autocensurásteis: ¿está ahí el tabú o es simple sentido común?
—Ese día, era un domingo, estábamos dibujando un Mahoma para la portada y en ese momento estaban quemando embajadas occidentales en Oriente Medio. De repente nos preguntamos: ¿Qué pasa si mañana queman una embajada española con la excusa de la portada de El Jueves y muere alguien? Nos pareció de sentido común cambiar de portada. (Aunque hay que decir que hemos dibujado a Alá, antes y después, centenares de veces.)
—“Seguimos indignados”: ¿creéis que valió para algo el 15-M, luego de ver cómo el PP sacaba la mayoría absoluta y lo que está haciendo?
—De momento parece que no pero ya se verá. El Jueves ha visto pasar muchos gobiernos, hemos durado más que cualquiera de ellos. La gente en España está muy indignada y nosotros lo ilustramos en clave de humor, creemos que es nuestra obligación profesional. De si eso sirve de mucho o no, ya se verá.
—¿Qué opináis de lo políticamente correcto, de no poder llamarle a un viejo viejo o a un ciego ciego?
—Es una estupidez que va in crescendo o, mejor dicho, iba… porque de repente apareció internet y ahí se han roto todas las fronteras. Menos mal.
—“Recortes de la prensa seria”: ¿os los manda la gente o tenéis a un becario recortando las chorradas que publicamos los periodistas?
—En El Jueves no tenemos becarios. La sección la hace Iu Forn que es un periodista con pasado documentalista que rastrea toda la prensa y sí, tenemos alguna ayuda de los lectores.
—¿Cómo os está afectando internet a vuestro trabajo? A veces da la sensación de que vuestros chistes son twitts o que ya los hemos leído en Facebook y viceversa…
—Es un tema preocupante. Internet tiene un peligro para nosotros: es gratis y la gente está encantada de trabajar gratis para internet, así que hemos de competir con miles y miles de personas que piensan ideas divertidas sobre actualidad. Tenemos una ventaja: ¡no saben dibujar como nosotros! ¡Fiu…!
—Entre tanta crisis: ¿notáis en El Jueves la del papel que se está llevando por delante a publicaciones centenarias en todo el mundo?
—Sí, por supuesto. Las ventas han bajado y la publicidad también. Tenemos un handicap que no podemos solventar: en España el 50% de los jóvenes (los que eran nuestros principales clientes) están en paro. ¿Qué podemos hacer? Rezar para que se acabe la crisis.
—Aunque lleváis décadas publicándola, ¿no creéis que cada vez hay más gente como Martínez el Facha?
—¡Sí! Es un personaje que ha ido y subiendo a lo largo del tiempo y ahora vuelve a estar de moda. ¡Qué desgracia de país!
—¿Qué hacéis para escoger el tema de la semana? ¿Veis televisión y leéis la prensa o directamente os vais al Menéame?
—Vivimos enganchados a la actualidad, televisión, diarios, internet. Lo de Menéame es para los más jóvenes.
—¿Y el gilipollas de la semana? ¿Es cierto que es cada vez más fácil escogerlo o era al revés?
—Efectivamente. Hay muchas semanas que tenemos tantos que hacemos dos o cuatro. Insisto: ¡qué desgracia de país!
—Y última: ¿la publicidad también os vale para hacer sátira si os dejan los anunciantes? ¿Los animáis a ello? Lo digo por Álvarez Cascos como marido en AshleyMadison.com…
—Normalmente no tenemos nada que ver con la publicidad que se inserta en El Jueves. Éstos de Ashley Madison.com son unos cachondos… ®