Elena Garro sin censura

Una nota personal desde mi escritorio

Esta nota consiste en una serie de palabras y de frases que brotaron espontáneamente al tener en mis manos el nuevo libro sobre la célebre autora de Los recuerdos del porvenir.

Elena Garro.

Este texto no pretende ser un artículo periodístico, ni una reseña, tampoco un ensayo académico sobre el nuevo libro de Patricia Rosas Lopátegui, Elena Garro sin censura. Obra inédita: guionismo cinematográfico, diario, dramaturgia, narrativa, memorias, investigación, epistolario, traducción (México: Gedisa, 2023). De eso se encargarán los periodistas, así como los investigadores que estudien la obra de Elena Garro.

Por lo tanto, esta nota consiste en una serie de palabras y de frases que brotaron espontáneamente al tener en mis manos el nuevo libro sobre la célebre autora de Los recuerdos del porvenir (1963). Así lo escribí:

“Mi hermana Flora me acaba de traer el libro sobre mi tía, Elena Garro sin censura, del que es autora Patricia Rosas Lopátegui. Apenas lo abro, lo ojeo aquí y allá y siento como un violento remolino de recuerdos, felices, tristes, de cariño, de dolor, como si hubiera entrado en un torbellino en el tiempo y viviera de nuevo lo que ya viví una vez.

Este libro es una obra en la que Rosas Lopátegui, mi querida Patricia, logra llevar a mi tía Elena a un lugar donde siempre había tenido que estar, como el gran genio literario de nuestro país y, además, la saca de la oscuridad en la que la colocaron Octavio Paz y su horda de incondicionales y serviles acólitos. Como si eso fuera poco, también da a luz lo dulce, alegre, brillante, carismática e inteligente que fue mi tía. Rosas Lopátegui está —hoy lo confirmo— hecha de la misma madera de mi tía: terca, terca en defender lo justo y enemiga de lo injusto. Es una gran persona, la admiro.

Finalmente, en este volumen vienen mis testimonios, que confié a Patricia y que ella consideró pertinente incluirlos en esta obra. Se trata de vivencias que experimenté cuando en varias ocasiones pasé temporadas al lado del matrimonio Paz–Garro y luego, ya divorciados, con mi tía Elena.

Hoy le digo a la autora de este volumen: Patricia, lo que has hecho es impresionante, ¡amor y terquedad son una magnífica combinación! Nunca pensé que mi tía fuera a ser más importante que Octavio Paz; todos hablan de ella y casi nadie del laureado poeta, y tú eres la responsable, y lo digo convencido de ello.

¡Un gran, gran abrazo! ®

Compartir:

Publicado en: Libros y autores

Apóyanos:

Aquí puedes Replicar

¿Quieres contribuir a la discusión o a la reflexión? Publicaremos tu comentario si éste no es ofensivo o irrelevante. Replicante cree en la libertad y está contra la censura, pero no tiene la obligación de publicar expresiones de los lectores que resulten contrarias a la inteligencia y la sensibilidad. Si estás de acuerdo con esto, adelante.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *