Diego Martínez, Lumen lab, también conocido como Jack’s son, co-fundador del sello Abolipop, experimentador de la electronica, charló con nuestro columnista sobre cómo crecer en el sonido y la cultura electrónica con una noción de juego.
“Enfant Terrible de la electrónica mexicana”, fue llamado en la revista californiana La Banda Elástica en 2004. Diego Martínez, mejor conocido como Lumen lab o Jack’s son, ha sido uno de los músicos electrónicos más propositivos y constantes de México en este joven milenio. Co-fundador del sello Abolipop y su proyecto lateral Suplex, diseñador gráfico y amante de la cultura urbana y la lucha libre, sin duda es una de las voces más ruidosas, dislocadas y punzantes de su generación. Lo que sigue es una charla entre carnales, de la música, del trabajo y también de sangre: Lost Martínez.
IM En 2000 comenzaste con el proyecto Lumen, trabajabas con una caja de ritmos e iniciaste a hacer sonidos electrónicos bastante ásperos en una limitada PC. El dato importante es que tenías ¡15 años! y optabas por una estética que muy pocas personas estaban interesadas en México, el noise rítmico. ¿Por qué no imitar a Nortec o hacer una electrónica más raver?
DM No me interesaba esa estética electrónica, esa corriente tanto de música-músicos-público. No me gusta imitar, lo mas fácil hubiera sido proponer un proyecto para Nopalbeat, que en su momento para mí fue eso, un sonido-tendencia a la par de Nortec. Y realmente en esa etapa de mi vida hasta desconocía un tanto de ellos, yo estaba más apegado a una “escena” gothic-industrial, y dentro de ésta lo más fácil hubiera sido hacer EBM, algo rítmicamente más cuadrado y armónico. Pero creo que me es difícil hacer ese tipo de estética porque mi cerebro reprocha bastante la continuidad o cierta monotonía, para mí la música y el sonido es un lenguaje de expresión y juego.
IM Pero tampoco el público gothic-industrial en México estaba listo para esto. Generalmente, es una escena que procesa demasiado lento los lenguajes y tendencias contemporáneas, parece que una “figura”, un “dios”, les tiene que decir que pueden abrir su mente y su oído, y entonces eventualmente lo hacen. Por ejemplo, a finales de los noventa no aceptaban los sonidos electrónicos, luego no entendían los live-acts sin guitarra, bajo y batería, después los kilos de distorsión y que no hubiera pulso (beat) continuo. Ahora bailan y parecen haber asumido, como casi todos los territorios, el noise. Sin embargo, a inicio de este milenio recuerdo a pocos proyectos y menos público, me acuerdo de Radical Out con un alto nivel, a Ogo dedicando más esfuerzo y rabia a su sonido, a un excelente Rugitus Aeternam de Tijuana, a Radical Evolution poco tiempo después de Lumen en Guadalajara. Eran pocos pero a diferencia de otros géneros más populares en el underground como el goth o el EBM, tenían mucho mejor nivel y contundencia. Recuerdo al Dr. Martín Mora saltando como loco en una tocada en Guadalajara en el Marsella, un restaurante que hicimos “club” por un par de ocasiones, mientras tú tocabas y grafiteabas una manta. Los goths lo veían como loco. ¿Qué recuerdos tienes, qué opinas de todo esto?
DM La verdad es que la “escena” gothic que me tocó vivir, hizo que me diera eterna flojera tratar de promover mi sonido por ahí. Gente muy cerrada y seguidora sin criterio propio a final de cuentas, y curioso porque se dicen o se les dice “diferentes”, pero como en muchas escenas musicales o movimientos contra-culturales, todo lo que esté bajo el nombre de la etiqueta(s) que les dijeron deben de seguir es lo que está bien, sin ni si quiera cuestionar el por qué o cómo de las cosas o los sonidos.
Recuerdo cuando seleccionaba o mezclaba música y me preguntaban que por qué ponía esas cosas tan electrónicas ravers, hablando de proyectos como Venetian Snares, Noisex, Download, Chris Clark, Sonic Dragolgo, etc. Se me hacía curioso ya que podían escuchar sin problema alguno discos de VNV Nation, Funker Vogt, Terminal Choice, y de cajón o por obligación a Skinny Puppy, Front 242, Einstürzende Neubauten, pero cualquier otra cosa fuera de esos y unos cuantos nombres más, ya no podía ser aceptada. Quizá hoy en día ya lo tienen permitido o mejor asimilado.
Y de la escena mexicana que mencionas recuerdo mucho y respeto a lo que era o es Binaria 13, que me tocó compartir escenario en un par de ocasiones y era muy interesante la respuesta de la gente, porque más que el gusto o interés por lo musical, era el morbo por el performance que hacían en vivo junto con la Congelada de Uva. Es algo curioso porque Lumen lab nunca ha dejado de producir bajo una influencia directa del Industrial-EBM-Postpunk, de hecho al inicio en la transición de Lumen a Lumen lab mi filosofía musical era “Frecuencias post-industriales alegremente rotas”, esa palabra-filosofía de “alegre” siempre fue como mi forma de alejarme justamente de la escena gothic-industrial mexicana.
IM Después de dos años de hacer algunas tocadas en Guadalajara, el Bajío y Puebla, cambiaste el nombre de Lumen a Lumen lab, asimismo, el abanico de influencias, desde el ambient, los break beats, el hip-hop. ¿Cómo cambió tu visión en el estudio? Y también ¿Cómo mutó tu propuesta en vivo? Recuerdo un par de conciertos en los que te acompañé, el primero en el Evangelina en 2002, que yo consideraría la primer tocada de glitch, IDM, noise, en Guadalajara, con Esfinter y los Barely Legal (después Monoploid) de México, incluso con Prisma (ahora Bandido); otro en una de las primeras fiestas del bar La Santa ese mismo año, traíamos mi sinte análogo-digital, caja de ritmos, no recuerdo qué otro aparato, y apenas lanzábamos algunos loops en una laptop prestada. ¡Era casi cargar el estudio al toquín!
“Enfant Terrible de la electrónica mexicana”, fue llamado en la revista californiana La Banda Elástica en 2004. Diego Martínez, mejor conocido como Lumen lab o Jack’s son, ha sido uno de los músicos electrónicos más propositivos y constantes de México en este joven milenio.
DM De los 15 a los 17 años con varios viajes y tanta gente que conocí, en ese momento mis ideas o inquietudes de evolucionar el sonido de Lumen eran extremas, pero no quería perder la corta trayectoria que había formado y solo di una evolución al nombre para hacerlo notorio, al menos para mí. Me alejé de varios colores sonoros oscuros, de los bombos de marcha militar y de estructuras quizá simples. En el estudio cambió esta dinámica con la obtención de mejor software y hardware, mayor libertad para explorar, mayor cantidad de timbres sonoros para poder fusionar varias estéticas.
Me tocó aun componer en hardware que me prestabas y después compré una Electribe EM1, no se conseguía tanto equipo en Guadalajara y era costoso, para mi edad y mis ingresos no era posible tenerlo. Me tocó una nueva etapa de la democratización de la tecnología y con ello vinieron bastantes mejoras en estudio y en vivo: poder viajar con equipo más pequeño y hacer mejores dinámicas en vivo, mayor control del sonido cargando menos equipo y lastimando menos la espalda.
IM Justo a raíz de esa tocada en Evangelina conocimos a Laura Becerra (alias Carrie) y Eric Gamboa (alias Destreza y posteriormente E.lebleu), quienes tenían dos proyectos muy interesantes, por una parte, Radioneurótica, una estación de radio por Internet (pionera de esta modalidad en México) con horas y horas de música interesantísima desde garage rock hasta clicks&cuts, y la colaboración de grandes melómanos como Alejandro Figueroa y Ahiram Matamoros, y por otra, Abolipop, que promovía y regalaba música desde su sitio en Internet, siendo entonces pionero del concepto de netlabel probablemente en Latinoamérica, recuerdo incluso canciones que promovieron gratuitamente de un grupo que después se popularizó, DNTEL. A la par Static Discos editaba sus dos discos emblemáticos: “Resonancia” de Fax y “Martes” de Murcof; Discos Konfort organizaba sendos festivales en la ciudad de México. Fue el mini-boom de la electrónica alternativa o IDM en México, ¿no crees? En 2003 Abolipop lanzó su primera compilación y comenzamos a tocar por muchas ciudades, además de conectar con el extranjero, pues a diferencia del rock y otras vertientes, en la electrónica siempre ha sido importante hacer nexos con otros países.
DM Recuerdo muy bien la tocada del Evangelina pues de ahí se desataron varias cosas, quizá para mí la más importante fue la fusión de lo que era nuestro colectivo Mundo Nuevo y Abolipop – Redioneurótica. En el 2003 editamos el primer compilado de Abolipop titulado: “No estamos solos”. Dicho titulo expresa muy bien esa etapa de nuestras vidas, habíamos varias personas haciendo nuevas propuestas sonoras pero sin saber que existíamos, y abandonamos nuestras casas y actitudes de esnobistas para salir a proponer nuevos sonidos de nuestra parte. En Guadalajara fue muy importante o interesante ya que no había propiamente una “escena” indie o minimal o experimental, nada de eso, entonces a los eventos de Abolipop iba todo tipo de gente, desde banda enfadada de los raves de Psycho Trance, House o Acidcabaret, hasta post-rockers por así nombrarlos, Geeks-Snobs, etc. Y en otras ciudades, y cada quien a su manera, estaban disqueras y colectivos como Konfort, Static y Soundsister, proponiendo una electrónica alternativa y en muchas ocasiones más arriesgada a la ya tan sonada en México.
Fue un muy buen mini-boom, muchos conciertos, discos editados, invitaciones a compilaciones o eventos fuera de México para todos los músicos de diferentes colectivos o sellos independientes de electrónica alternativa. Público muy interesante, hasta gente que con el tiempo se convirtieron en nuestros amigos cercanos. Creo que las cosas tenían que cambiar, ya que mucha de la gente no estaba ahí por un gusto real de la cosas, sino por una búsqueda más bien.
IM“Comiendo algodón en la pista de baile” es tu primer álbum, se publicó en 2004 y generó nuevas rutas: fue el primer CD de Abolipop con una fuerte distribución en México vía ProDisc, el empaque en pasta dura hasta Thomas Morr (del sello Morr Music) dijo que era un lujo, y contó con la colaboración de JIS en la ilustración. También obtuvo buenas reseñas en medios especializados de países europeos, en donde también se vendió. Paralelamente, comenzaste con el proyecto Jack’s son orientado a la experimentación del hip-hop e influenciado por el dub, el soul y el funk. ¿Crees que esta etapa fue el trampolín más potente de lo que haces hasta hoy en día?
DM ¡Totalmente! Esa etapa especifica del 2004 al 2007 fue muy fuerte e importante para mí. Cuando se editó el disco de “Comiendo algodón” se sumaron varios factores y personas que hicieron que las cosas resultaran de una manera magnífica, apoyado por gente como el Maestro JIS que interpretó de la mejor forma la idea de comer un algodón a la mitad de una bailongo. El señor Fernando Corona aka Murcof que apoyó el proyecto y masterizó el disco, Uriel Waizel y Miquel Canales que apoyaron con darnos el lujo de editarlo en pasta dura y con una distribución genial que ayudó a que otros públicos y mucha gente tuviera acceso a ese disco y a la compilación “Transformaciones”, que salió a la par de “Comiendo algodón”, y Eric y tú que enviaron ese disco a diferentes medios para que se hablara de él fuera de México. Se dieron muchos conciertos, se me invitó a tocar a Colombia con una excelente selección de músicos, me tocó conocer y compartir con varios artistas que he seguido desde hace varios años, y la retroalimentación de ellos ayudó mucho, y justamente después de ese viaje se redireccionó y editó el primer disco de Jack´s son.
Las cosas salieron y se dieron a tiempo, esa etapa sí fue un trampolín, me tocó y toca vivir varias etapas de la música electrónica independiente, como siempre unas mejores que otras, pero tengo bien aprendido que no hay prisa de nada y así trabajo mucho más a gusto.
IM ¿Por qué crees que los músicos electrónicos mexicanos voltean a ver al extranjero? A diferencia del ámbito del rock que es más local, o en el mejor de los casos, nacional. ¿Será por el idioma al cantar? ¿Será que el sonido electrónico es algo que puede compartirse de manera casi natural con gente de distinta geografía? Creo que no es fortuito que se reconozca el trabajo de Nortec, Murcof, Fax, Cubenx, Luis Flores, por supuesto tú mismo, o en la experimentación, Rogelio Sosa, Mario de Vega o Manrico Montero, por citar sólo algunos nombres que su trabajo ya tiene una naturaleza de difusión por varios rumbos del orbe.
«El espacio entre editar las segundas producciones de cada uno de mis proyectos ha sido largo, cinco años aproximadamente. Una de las cosas que más me gusta de esto es no tener prisa de nada, el poder realizar una maqueta y regresar meses después a escucharla o plantearla de otra forma».
DM A veces algunas partes caminan mas rápido que las otras y no siempre hay el público en el momento que el productor realiza ciertos sonidos, y es necesario de manera automática exportar y exponer el trabajo en alguna otra parte del mundo. Siempre he creído o he sido de la idea de que la cultura electrónica es un lenguaje universal y se separa o se aleja de todos esos clichés de otras músicas y específicamente del Rock, no es necesario tocar en un mega escenario con muchos músicos y muchos instrumentos “viejos” para que suene mejor, no es necesario tener un camerino y miles de bebidas y destrozarlo (aunque hoy en día de varios músicos electrónicos lo dudo), no es necesario ser un héroe local o con un poco más de visión un héroe nacional.
IM “Shhh!!” fue el nombre del segundo álbum de Lumen lab y ahora estás a punto de publicar “To Clear”, segunda placa de Jack’s son, ¿Cómo ha evolucionado tu trabajo en este lapso que comprende ambos discos? Pasó el micro-boom del que hablábamos y debe ser otra etapa para ti. En México se van las modas o tendencias más cool y justo es cuando la música empieza a madurar realmente. ¿En tu caso cómo ha sido esto a nivel de producción y también en vivo?
DM El espacio entre editar las segundas producciones de cada uno de mis proyectos ha sido largo, cinco años aproximadamente. Una de las cosas que más me gusta de esto es no tener prisa de nada, el poder realizar una maqueta y regresar meses después a escucharla o plantearla de otra forma. En este lapso perdí entusiasmo por las dinámicas de la música y sus públicos, a la par gané entusiasmo por el sonido y esto me ayudó o evolucionó. Aunque siga siendo música mi producto final, mis dinámicas en estudio me son mucho mas interesantes y en vivo cada día entrego mas energía y dislocación tanto para esos nuevos públicos como para cautivos de mi sonido.
IM Cuando iniciamos Abolipop Records nuestro objetivo principal era publicar el primer álbum de los proyectos que participaban entonces en el colectivo, para así fungir como trampolín y que cada artista siguiera adelante con otros medios más potentes. De esta forma salió un EP de Nebula 3, el primer CD de Lumen lab, Transistor, Jack’s son, Aeropuerto, Signal Deluxe e incluso mi primer CD de obras de arte sonoro. Probablemente Carrie es el único proyecto que tiene álbumes publicados y que no salieron bajo Abolipop, o Movus, que hicimos todo en casa pero al final sus aspiraciones rockeras no fueron afines. Los demás artistas jamás hicieron o terminaron su primer álbum desafortunadamente. Hoy con Suplex publicamos EP’s, sesiones en vivo o rarezas de músicos emergentes y otros ya con trayectoria, con mucha energía por lanzar sus trabajos, con el objetivo claro de producir y difundir. ¿Qué más es Suplex o por qué se dio este proyecto? ¿Qué representa trabajar con una generación ya posterior a la de la década pasada de experimentación y electrónica en México?
DM Desde el inicio Abolipop Records regalaba música para promocionar a sus artistas, creo que Suplex fue sólo una evolución y formalización del pensamiento que ayudó a estar a la par de estas nuevas dinámicas de promoción musical – artística. Otra de la razones de la creación o formalización de Suplex no sólo es el publicar música, sino próximamente libros, videos, entre otras expresiones artísticas dentro de un plano alternativo. Es un proyecto a mediano plazo, obvio de inicio es mucho mas rápido la realización de un EP de música que un cortometraje o un libro. El nombre viene de un movimiento ofensivo de Lucha Libre para seguir en pie y vigentes. Suplex ha caminado muy bien y con mayor energía y formalidad de los nuevos artistas que se han involucrado y creído en el proyecto.
IM ¿Qué hay de tu segundo disco como Jack’s son y el tercero de Lumen lab?
DM Mi segundo disco de Jack´s son titulado “To clear” sale en mayo de 2012, con la disquera Blaq Records de la ciudad de México. Es un disco en el cual caminé mucho para poderlo cristalizarlo. La idea principal del disco es el borrar o dejar atrás muchas cosas para poder seguir caminando hacia otros, y de preferencia, mejores caminos, musicalmente va por una estética dub, colores oscuros con bajos fuertes y un tanto de ritmos hacia el dancehall, interpretados con un perfil latino-mexicano. Este nuevo disco se aleja un poco del hip-hop pero es sólo por este álbum, vendrán cosas nuevas con diferente orientación. Mi música es reflejo de mí y de mi entorno.
Lumen lab tiene preparado conceptualmente el tercer disco desde hace año y medio, falta terminar un par de proyectos más para iniciar éste de lleno, la idea es a mediados de año comenzar y musicalmente quiero tener varias colaboraciones de guitarristas de la escena de punk-hardcore, para inyectar un tanto más de energía y evolucionar el sonido del disco anterior, quizá algo de voces, es necesario volver a decir algo.
IM ¿Dr. Wagner Jr., Místico o Rey Mysterio?
DM La pregunta mas difícil. Dr. Wagner Jr. es definitivamente mejor luchador que los otros dos, pero lleva años sin luchar el “fashionista”; Místico me cae muy bien y me agrada su estilo aéreo, muy fino, y además ayudó a impulsar una nueva etapa de la lucha libre. Rey Mysterio me entretiene mucho pero definitivamente no soy fan de él.
¡Ahm! Voy por Dr. Wagner Jr. ®
Algunos links (videos y música) relacionados:
Jack’s son
