Un encuentro de periodistas en el que, entre reflexiones y exabruptos, se discutió la necesidad de replantear el periodismo mexicano a partir de la veracidad y la imparcialidad.
“No debe haber interlocución con los criminales”, dice Sergio González Rodríguez al final de la presentación de su libro El mal de origen en relación con la petición de tregua navideña de Javier Sicilia a los grupos de narcotraficantes, y retoma el título de Ortega y Gasset Temas de nuestro tiempo para insistir en la extraordinaria oportunidad que nos ofrece esta época para reflexionar sin dejar de ejercer la crítica de lo que está mal —la anomalía— y valorar lo que se hace bien. El odio siempre ha sido parte de la naturaleza humana, pero debemos encontrar las formas de contrarrestarlo, aun en una sociedad cambiante y que se degrada constantemente. Una manera, dice el autor de El hombre sin cabeza, es gravar el capital financiero en todo el mundo y volver al Estado de bienestar.
Me desconcierta mi amigo Diego Osorno cuando expresa —en el Encuentro Internacional de Periodistas: “Historias contadas desde la trinchera”— su horror ante el récord mexicano por el mayor número de zombis en una sociedad amenazada por el crimen. Vamos, es un país de ciento diez millones, pienso, y todos se divierten a su manera: unos van al cine, otros a cantinas o a bailar cumbias. Es parte de la respuesta del periodista a una chica que casi grita su indignación ante una “sociedad idiotizada” y “manipulada por los medios”. Menos mal que ella ha escapado al influjo maléfico y perverso de Televisa y TV Azteca y puede concientizar a sus compañeros.
En la mesa “Elecciones 2012, periodistas a prueba”, la intervención del periodista Manuel Durán, del diario Mural, destacó por la claridad de su exposición: el periodismo debe regresar a la academia, esto es, a la precisión, el cruce de datos, la observación antropológica, la investigación formal. El periodista no es un fiscal ni un policía y debe alejarse de los lugares comunes de la narración; tampoco debe convertirse en el protagonista de la historia.
Es cierto que en los medios predomina la presencia de los políticos, por lo que debe darse mayor importancia a las voces de los ciudadanos, a sus historias y a sus intereses, dijo Óscar Camacho, de la revista emeequis. Un encuentro de periodistas en el que, entre reflexiones y exabruptos, se discutió la necesidad de replantear el periodismo mexicano a partir de la veracidad y la imparcialidad.
Además opino que debería haber internet gratis en toda la Expo, que la comida podría ser mucho mejor y menos cara y que debería haber un par de puestos para lustrar calzado. ¡Nos vemos en la próxima Feria! ®