Harían bien los seguidores de esta banda reguetonera y sus entusiastas comentaristas en leer con calma las razones que esgrime el autor para hacer ver la falsedad de la rebeldía de Residente y sus músicos.
Antes de proceder contra Calle 13 quisiera hacer tres advertencias:
1) Mi problema no es con la gente que disfruta bailar reggaeton o haya descargado alguna canción del grupo puertorriqueño, sino con todos los que argumentan que Residente es un gran letrista, un artista fuera de serie, o peor aún, portavoz y bailarín de un pensamiento político rebelde.
2) En más de una ocasión me refiero al público que sigue a Calle 13, estoy seguro de que existen excepciones, no necesitan recordármelo.
3) Doy por sentado que tocan reggaeton, no estoy dispuesto a discutir lo contrario.
Ahora sí, una revancha mínima por todas las ocasiones en que me he sorprendido escuchándolos en contra de mi voluntad.
Cada quien se irá transformando en su propio personaje
El hombre no tiene memoria, pero hace apenas una década existió otro músico que vendió millones de discos en todo el mundo, también rapeaba más de lo que cantaba, fue mediatizado como irreverente y provocador, se le reconocía como un letrista original, se disfrazaba en sus videos, usaba recursos humorísticos, era el chico malo consentido de MTV, compartía la misma y desconcertante afición por las camisetas sin mangas. Residente fue creado a imagen y semejanza de Eminem. Ambos pertenecen a una tradición que posiblemente comenzó con Elvis, sobrevive hasta nuestros días y se ha sabido moldear a las distintas épocas. El espectáculo mediático, en cualquiera de sus esferas, ya tiene roles asignados, están en perene casting para llenarlos, la vertiginosidad de nuestros tiempos lo demanda. Huyssens habló de la mass media como máquinas de producir presente. Posmodernidad y remake. Por su neurosis informativa, los medios mercadean estereotipos, no hay tiempo para construir narrativas o personajes complejos. A principios del siglo XXI se requieren, por ejemplo, la princesa pop virginal, el baladista maduro para las mujeres maduras, de la misma forma en que se necesita un diputable en representación del gremio o el enemigo infiltrado entre los titulares de la selección mexicana y claro: un rebelde de juguete, la figurilla de acción de la industria musical.
A pesar de ello, considero que Eminem es un artista superior y encarna mejor la figura del rebelde que ambos proyectan. El verdadero nombre del estadounidense es Marshall Bruce Mathers III, creció en un suburbio de Detroit, por algunos años en casa rodante, educado solamente por su alcohólica madre y su querido tío que lo introdujo al hip hop antes de suicidarse, fue víctima de severo bullying en la escuela, entre una turbamulta de afroamericanos logró destacar en las batallas de rap, consiguió un contrato para grabar y de un día a otro era millonario, protagonizaba los titulares de los diarios.
El verdadero nombre de Residente es René Pérez Joglar, hijo de un conocido abogado y una actriz, perteneciente a la clase media puertorriqueña, cursó un bachillerato en artes, viajó a Georgia y Barcelona para continuar su estudios en cine y edición de audio, una crítica favorecedora en Time Magazine catapultó a Calle 13 a la cima, llenó su estantería de Grammys.
Por supuesto, sus biografías no los validan ni desacreditan por sí mismas, pero son importantes para entender lo que representan como figuras rebeldes mediáticas. Las letras de Eminem son de explícita violencia, habla de matar a su esposa, del odio a su madre, sus problemas con las drogas, emprendió una cruzada sanguinaria contra la cultura pop y la industria de la música. Tras unos cuantos días estudiando sus letras, me queda claro que no se considera una autoridad moral, sino el resultado de una normalidad violenta como la de millones, siente tanto asco por el mundo como por sí mismo. Su rebeldía es auténtica porque emerge del lado más oscuro de la conciencia de una época, se destroza en cada verso que escribe, dejó un valioso testimonio sobre los daños que sufre un individuo crecido en un ambiente violento. Su personaje halló en el rap el vehículo natural de expresión para su pensamiento.
Por otro lado, Calle 13 no puede acreditar su rebeldía en sus canciones, por lo tanto necesita construir su personaje mediante el abuso de la autorreferencialidad, él mismo se nombra obsceno, inmoral, el máximo exponente del pecado…
Soy rebelde
como un monaguillo en la iglesia
fumando cigarrillo
sin que la monja se lo sospeche
soy rebelde
como una vaca que no quiere dar leche.
Así su rebeldía, así los que se la crean. Basta echar un vistazo a la prensa que recibe el grupo para entender el porqué de cómo se le percibe socialmente, titulares como “Revolución” o “La voz rebelde de Latinoamérica”, o preguntas sobre cómo puede tener un pensamiento tan radical o cómo le hizo para ser aceptado por las élites intelectuales del continente. Sí, bueno, jmmm, ¡achú!
Calle 13 no puede acreditar su rebeldía en sus canciones, por lo tanto necesita construir su personaje mediante el abuso de la autorreferencialidad, él mismo se nombra obsceno, inmoral, el máximo exponente del pecado…
La estrategia de los puertorriqueños es atentar contra lo que teóricamente está prohibido, a pesar de que convivimos a diario con ello. Por ejemplo su tratamiento del sexo, tan escandaloso para muchos, es muy light comparado con lo que cualquier hombre en edad de masturbar ve cada semana en internet. Le apuesta a la doble moral, a través del escándalo frívolo legitima aquel prohibido que en realidad es aquel normal, entonces las señoritas obtienen su dosis de pecado y luego se sienten culpables después de follar.
Su vía de expresión, a diferencia del rap, nació como un producto comercial. Anarquía artificial, defensor de todas las causas, por momentos su figura pública parece un tríptico del Instituto de la Juventud. Su pensamiento encarcelado en la forma del reggaeton. Me atrevería a decir que se trata de un conservador en la medida en que sus canciones se construyen a partir antivalores de todos los días como ignorancia o machismo. Es otro anuncio de telemarketing.
Camus advierte: “En arte, la rebelión termina y se perpetúa en la verdadera creación, no en la crítica o el comentario”. La rebeldía artística en la posmodernidad sólo puede existir si nace de la inteligencia y el riesgo, concilia lo íntimo y lo universal, edifica otros universos cerrados y verosímiles, atraviesa el tiempo como una bala que nunca reducirá la velocidad.
La rebeldía se ha vuelto un elemento sustancial del espectáculo. Al menos Eminem tuvo la decencia de reconocerlo. “I am whatever you say I am. If I wasn’t, then why would I say I am?”
Poética y corrección de estilo
Los que huelen a meados de viejito,
a esos son los que yo resucito
y les devuelvo el apetito
con un poquito de pornografía.
Mujer tú eres toda una geometría,
tú tienes el pudín como me gusta,
estirao con estrías
como de repostería,
con la falda corta
al estilo de Miami,
enseñando la mitad del salami.
Aquí te traigo juguito yambinga,
coño zapatea que tú no eres gringa,
yo te sacudo como un estornudo,
te pongo a vomitar el desayuno,
te enseño mi lenguaje hombruno
y con él te vacuno
—“Cumbia de los aburridos”
Poética de la ocurrencia, versificación del inventario. Salta de un campo semántico a otro como si se tratara de cambiarse los calcetines. Debe hacerse el protagonista cada línea. Encabalgamiento de versos vacíos. Cuando la fragmentación no se utiliza para crear una visión unitaria o integradora del mundo es un recurso holgazán. Un lenguaje legitima al otro, así que se vale de modismos, barbarismos, argot urbano, insultos y algunas provocaciones gratuitas para crear un show efectista. Su música fue hecha para el presente, sus referencias poperas se irán deslavando porque aluden a la inmediatez. Como el atún y otros productos enlatados, Calle 13 viene con fecha de caducidad.
Aunque no fuera de mi gusto “Atrévete te” me pareció en su momento fresca e ingeniosa, su mezcla de spanglish, construcciones absurdas y referencias pop sonaban distinto, pero jamás pensé que harían toda una discografía multiplatino, multimillonaria, con base en la rima fácil.
En repetidas ocasiones Residente demuestra que además de talento le hace falta un diccionario. Me pregunto si cuando dice “eres pura geometría” se refiere a que es poligonal, cúbica o lineal. Elegí ese ejemplo del epígrafe, pero hay decenas más; si esos sesgos de información, construcciones estilísticas no se le perdonan a un joven escritor cuando publica un libro, no entiendo por qué aplaudírselas a un normalón que encabeza las listas de best sellers.
En su éxito con Café Tacuba nombra cualquier persona-animal-cosa que se le ocurra para rematar el estribillo e integrarlo al “aisevá” con un “no hay nadie como tú amor” en el coro. La dificultad creativa de esa canción es proporcional a la que se requiere para hacer la lista del súper. Prefiero ser un intolerante, mamón, cascarrabias, raboverde, quejumbroso y arrugado que suponer una inteligencia privilegiada se esconde detrás de versos como “Hay personas gordas, medianas y flacas,/ caballos, gallinas, ovejas y vacas”. He visto a los Teletubbies rapear mejor que eso.
Narrativa de estereotipos
Rompe varias reglas elementales para cualquier narrador. El mayor problema es que la construcción de sus personajes, ambientes, hechos, su lectura del mundo en general se fundamenta en estereotipos. Penosamente, acredita las creencias de sus seguidores en lugar de confrontarlos con alguna otredad. Tiene que dar su opinión sobre todo, lo cual se vuelve muy incómodo. Peca de cursi y juicioso. Por momentos es moralista, por no decir mesiánico. Le pone demasiado peso a la frase por encima del todo, es discontinuo e inconexo. Sobrestima sus propias obsesiones por encima de las de sus personajes, les mete el pie, no los deja caminar.
La industria de la fiesta
Con base en sobreproducción en estudio, grupos como ellos o los Black Eyed Peas contribuyen a establecer la fiesta como un templo artificial que cumple para muchos la función que para un buen cristiano ir a misa los domingos. Su utilidad para construirnos como individuos o desarrollar un pensamiento independiente es más o menos la misma.
Se trata de una auténtica distopía: la industria de la música sometida ante la industria de la fiesta. Punchispunchis, basta echar un vistazo a las listas de canciones más escuchadas para percatarse de que el público mayormente busca un ritmo pegajoso para bailar la noche de un sábado. Es un producto cultural que no te compromete a empatizar con él, a mimetizarte con la obra, sino a escucharlo de fondo. La música, sea arte o entretenimiento, tiene más poder que cualquier otra expresión creativa. Calle 13, al igual que tantos otros grupos del aparato comercial, sirve para fijar valores y ninguno más sobrevalorado que su visión de lo divertido. La fiesta es un simulacro de lo extraordinario, se ha vuelto parte de nuestra normalidad: estar sentando en la barra mientras se calienta la cerveza es casi tan emocionante como lavar los platos. No hay que menospreciar, valga la calamidad de la época, hasta qué punto uno es lo que consume.
Hay temas que no le pertenecen a la fiesta, la forma y el fondo deben fundirse, insisto: resulta imposible considerando que se trata de un ritmo que fue creado para acompañar con Bacardí, bailar en un espacio donde ni siquiera puedas escuchar tus pensamientos y tentativamente recibir tremenda untada de camarón de algún cholo con mostacho cantinflero. A base de sobreproducción en estudio, grupos como ellos o los Black Eyed Peas contribuyen a establecer la fiesta como un templo artificial que cumple para muchos la función que para un buen cristiano ir a misa los domingos. Su utilidad para construirnos como individuos o desarrollar un pensamiento independiente es más o menos la misma. El deseo es un producto de consumo.
La industria del amor
Por ti yo hago lo que sea
peleo contra 300 ninjas en Corea
por ti pesco 500 delfines
y cruzo la cordillera de los Andes en patines
—“Electro movimiento”
La palabra amor en el pop no vale ni un penique, aunque pesa una tonelada. La industria musical, cual loop del Vaticano, lo ha difundido como el valor primigenio del hombre, el que lo hará ser justo, libre, empático, aunque principalmente ha conseguido hacerlo cínico, manipulador, perezoso y egocéntrico. Ama y fiestea, teme a tu soledad. El amor es la ilusión más verosímil.
No es gracioso o no entendí
La parodia de la parodia de la parodia no es graciosa. Como nada de lo que hace es serio, para sus fanáticos no puede ser atacado en serio, sólo defendido. Su humor es más escatológico que irónico, payaso que sarcástico, ridículo que absurdo, ingenuo que ingenioso, technicolor que negro. “Lo cómico, para producir todo su efecto, exige como una anestesia momentánea del corazón. Se dirige a la inteligencia pura”. Lamentablemente los puertorriqueños carecen de esa jiribilla mental que señala Henri Bergson. En resumen: se trata un mal chiste que nunca entendí.
Políticamente correctos
Calle 13 es políticamente correcto, es decir: prejuicioso, maniqueísta, ignorante, artificial, patriotero y guadalupano.
Tómese como evidencia este retrato cursi y exotista del migrante.
En tu sonrisa yo veo una guerrilla,
una aventura, un movimiento.
Tu lenguaje, tu acento.
Yo quiero descubrir lo que ya estaba descubierto.
Ser un emigrante, ése es mi deporte.
Hoy me voy pal’ norte sin pasaporte,
sin transporte,
a pie, con las patas.
Pero no importa este hombre se hidrata
con lo que retratan mis pupilas.
Los migrantes sufren toda clase de abusos (inclusive por parte de mexicanos), y dudo que consideren lo suyo un deporte. También supongo que tienen piernas y no patas, están más preocupados por ganar el pan que en la guerrilla, y me queda claro que el asunto importa y definitivamente los mojados no se hidratan con lo que retratan las pupilas de Calle 13. Me pregunto si le interesa más la problemática migratoria por su trascendencia sociopolítica o porque nada se cotiza más en el mercado que el efímero presente.
El mensaje político que transmiten es el mismo que se puede escuchar en cualquier peluquería. Le añaden algunas groserías más, le meten sazón en el estudio y engañan a cientos de miles de jóvenes “alternativos” haciéndoles creer que tienen conciencia de la realidad política porque:
a) Están convencidos de que existe un sistema y se trata del principal enemigo. ¿Dónde comienza y termina ese sistema? ¿En qué consiste? ¿Quiénes lo controlan? ¿Con qué propósitos, medios, estrategias? ¿Cuáles son sus mecanismos? ¿Dónde puedo consultar su organigrama? ¿Son una célula maquieavélica o una organización civil?
b) La culpa siempre puede ser de Estados Unidos, no hay necesidad de matizarlo, encarnan el mal y no cabe duda de que esconden los cuarteles del sistema.
c) “Inches polítikos me cai que son una miarda, sólo kieren jodernos y kreo que devieran meterlos a todos al vote por pendejos”.
d) Sólo una revolución podrá salvarnos del sistema, los políticos y Estados Unidos. ¿Cuál revolución? No sé, habrá que preguntarles a los caudillos del reggaeton.
¿Quién hubiera dicho que José Martí sería la figura más influyente en la letrística latinoamericana del siglo XX e inclusive de principios del XXI? ¿Y quién hubiese predicho que para colmo no lo sería por su visión poética, sino por su proyecto ideológico? ¿Y quién en su insano juicio hubiese adivinado que el aparato musical permitiría que la faramalla y el perreo tuvieran más difusión en unas semanas que la obra del pensador latinoamericano en una vida?
A la medida de MTV
Desde que la música llegó a la televisión y en la medida en que otros formatos se han consolidado, ha tenido que mutar en un espectáculo que integra elementos teatrales y multimedia. Gracias a ello presenciamos el gran muro de Pink Floyd, la trayectoria camaleónica de Bowie, las alucinaciones de Génesis y Roxy Music, los videos de Michael Jackson y los visuales de Daft Punk.
De nuevo fue un formato comercial, el videoclip, lo que comprometió esta vena de la música. Cuando la gente perdió el interés y los ratings de MTV cayeron en picada vino el internet a salvarlos, sólo que ahora compiten con un mundo virtual que sólo conoce el aquí y el ahora, cualquiera cierra o cambia de pestaña cuando guste, así que necesitan ridiculizarse más y por eso casos tan lamentables como el de los puertorriqueños o la señorita Gaga.
Veo sus videos y queda claro que si fuera buen músico no tendría que ser un entretenedor, un payasito tatuado cuya empresa musical demanda que siempre deba llamar la atención sin importar si tiene algo que aportar. ¿Pueden nombrar algún gran músico del siglo pasado que se degradara a sí mismo de tal forma? Calle 13 se sostiene gracias a YouTube.
Todo un caballero
Calle 13 es políticamente correcto, es decir: prejuicioso, maniqueísta, ignorante, artificial, patriotero y guadalupano.
Después de escucharlos largas horas diría que la representación que hace Calle 13 de la mujer es la de una máquina mamadora y tragasemen, tetona y escotada, con unas nalgotas para nalguear. Curioso que sus feligreses lo defiendan diciendo que se trata de una parodia del reggaeton, género que se caracteriza por el contenido machista de sus letras. De nuevo, se engañan si creen que el aparato pop no influye en cómo experimentamos nuestra sexualidad o percibimos al otro género. Me encantaría ver qué harían sus fanáticas si una noche cualquiera en cualquier bar un feo con suerte o una sonrisa colgate se les acerca bailando reggaeton y les recita al oído:
Yo sé que tú quieres chuparme las quenepas,
aunque no sean de Ponce.
No importa que no sean ni de oro,
ni de plata, ni de bronce,
lo que sé es que te gusta el roce,
también sé que te gusta mi elefante como tose.
La industria de la música
¿Buscan rebeldes en la música? Encuentren a Dylan, Zappa y Davis, tres figuras que se resistieron a ser caricaturizadas por los medios, se escabulleron de cualquier definición. El primero lo hizo abandonando el folk, el género con el que había cautivado infinidad de fanáticos en el mundo para mudarse al rock, recibió suficientes críticas y abucheos para llenar varias veces el Estadio Azteca. Zappa es el músico rebelde por definición, tanto que inclusive se mantuvo sobrio en el apogeo del hippismo, parodió a los Beatles, luchó incansablemente contra la industria de la música y siempre sonó absolutamente original. Finalmente Miles, tenía más heterónimos que Pessoa, se reinventó a sí y al jazz en repetidas ocasiones, en álbumes tan radicalmente distintos, infinitos y complejos como podrían serlo Kind of blue, Bitches Brew y Sketches of Spain. Son comparaciones descabelladas, pero me interesa porque se trata de tres artistas cuya música demanda ser escuchada atentamente y hasta el fondo para ser comprendida, no se adhirieron a la forma de moda en el mercado, sino que se inventaron una propia que les permitiera expresar su espíritu.
Ahora que desaparecieron los cassetes y asumiendo que al CD no le quedará tanta vida, la música comercial se nutrirá aún más de la inmediatez, dejarán de producir discos para lanzar sencillos de acuerdo con la ocasión.
Si me preguntan, el punto de quiebre fue cuando Elvis se vendió a los casinos de Las Vegas. La rebeldía llegó al supermercado. La industria musical se volvió un aparato de control que atenta contra nuestra voluntad de ser.
Vivimos un momento definitorio. Por un lado, las disqueras lanzarán cientos de miles de discos de sus elegidos, los harán sonar en antros y estaciones de radio, les conseguirán boleto para los principales festivales, realizarán espectaculares videoclips, se mantendrán cerca de sus fanáticos mediante Twitter. Por otro, el internet democratizó los contenidos, pueden tener el disco que quieran con un clic. Sea cuál sea la virtud que encuentren en la música de Calle 13, pueden hallarla en versión mejorada en otros autores. Cualquier época, procedencia, ritmo, la Musiteca de Babel, una auténtica maravilla del hombre a su alcance, sin moverse de su silla favorita. Todos somos consumidores, pero cada quién puede elegir cómo serlo y en cierta medida elegir al mismo tiempo lo que son y desean ser. Por lo menos hay que conocer lo otro, no seguir la fila al circo, para poder en verdad elegir.
Si me preguntan, el punto de quiebre fue cuando Elvis se vendió a los casinos de Las Vegas. La rebeldía llegó al supermercado. La industria musical se volvió un aparato de control que atenta contra nuestra voluntad de ser.
Residente se confiesan en sus propios términos:
Baterista de pequeño, rapero cuando adulto,
por eso riman a tiempo todos mis insultos.
A las mentalidades prehistóricas
las capturo con groserías luego las mato con retórica.
Los problemas no se dan por sentado
y más cuando hay abuso de parte del estado.
Sería muy fácil para mí escribir un bolero
o hacer un video rapeando encima de un velero
con mujeres en pelotas acariciándome los huevos,
sacrificar mis ideales pa’ venderte un disco nuevo…
Guy Debord lo escribe en mejores palabras. Esta cita lapidaria aparece en La sociedad del espectáculo y contiene la esencia de lo que he intentado expresar:
La alienación del espectador en beneficio del objeto contemplado (que es el resultado de su propia actividad inconsciente) se expresa así: cuanto más contempla, menos vive, cuanto más acepta reconocerse en las imágenes dominantes de necesidad, menos comprende su propia existencia y sus propios deseos. La exterioridad del espectáculo respecto del hombre activo se manifesta en que sus propios gestos ya no le pertenecen a él, sino a otro que lo representa. Es por eso que el espectador no se siente en su sitio en ninguna parte, porque el espectáculo está en todas.
Sin darnos cuenta firmamos un pacto social con la industria de la música. Ante las crisis patrióticas tras las guerras, confundidos en el apogeo de la posmodernidad, nos ofrecieron refugio, identidades empaquetadas y lo tomamos porque era lo más fácil. Ah, maldita costumbre. Urgencia por pertenecer, por no quedarse solos, en los huesos y en posición fetal. Entonces existen punketos, metaleros, devotos de Cerati, ravers, creyentes de Silvio, indies, emos e infinidad de especímenes cuyo estilo de vida se define en buena medida por la música que consumen. Nos veo en la calle con audífonos, llenando cualquier escenario para concierto, descargando un torrent, cantando en el coche, bailando toda la noche en la discoteca…
La música es una dictadura perfecta. ®
Azulita
«la rebeldía se ha vuelto un elemento sustancial del espectáculo»
«identidades empaquetadas»soy una mujer con muy pocos dotes de escritora pero realmente le has dado forma en tus ultimas lineas a un pensamiento que es para mi recurrente. Que maravilloso que quede aun gente con ideas valiosas y propias y el resto que sigan sintiendose libres con lo poquito que los medios les sueltan las riendas.
Gonzalo
El articulo vacila entre argumentos válidos y un tono de fastidio hacia el grupo, que el autor al menos ya admitió. Más allá de esto, cabe resaltar lo forzado de las comparaciones, como aquella con Eminem. Se hace necesario, igualmente, enfatizar de nuevo que la crítica presentada va dirigida a la exaltación de la supuesta consciencia social y política de Calle 13, como heraldos de las causas en pro de los desposeidos. En este sentido, cabe resaltar que Calle 13, más que ser un producto de la tradición de Eminem, se nutre de una corriente que podría llamarse «alterna» que viene desde los noventas, de alto contenido social, entre los que cuentan grupos tan populares como Manu Chau, Fabulosos Cadillacs, Todos tus muertos, Ska-P, y muchos grupos mas.
Al entrar el nuevo siglo, estos grupos perdieron fuerza y el vacío lo aprovechó Calle 13, sin contar con que se convirtió en la excusa de los «alternos» para bailar reggeaton. La pobreza de sus composiciones es evidente, no hay nada ingenioso, ningún verso memorable. Pero, de nuevo, lo sencillo vende, la música compleja requiere tiempo, detenimiento, educar el gusto, como diría Hume. Por otro lado, la música sirve igualmente para divertir, para el esparcimiento, no tiene por qué brindar composiciones complejas ni versos memorables. Este tipo de música también es necesaria, tanto como contingente, no perdura, se releva constantemente, tanto como vende. Eso no importa, pero, de nuevo, no se critíca esto, sino su pretención de rebeldia.
Esa crítica de los puristas de que el momento en que algo se vuelve famoso pierde su sentido es una pendejada. Hay artistas que simplemente son tan buenos que trascienden los límites de su independencia, no por eso son vendidos. Sin embargo se puede trazar una diferencia. Hay grupos tan buenos que su popularidad es inevitable, y no por ellos rotan en las listas de MTV, así llenen estadios y vendan millones de discos. Pero ellos no son producto del mercado, aunque terminen catapultados por él… en cambio calle 13 sí adopta su imagen de lo que percive venderá. De Atrévete a Latinoamérica hay una brecha grande que yo explicaría por el hecho de que se apropiaron de la tendencia alterna de los 90s que terminó siendo tan popular.
Existe un peligro en la masificación de la crítica fácil, sin profundidad, y es que imprime en la psique de las personas la mediocridad intelectual y la complacencia fácil. Escucho Calle 13, ya soy crítico y rebelde. Lastimosamente el contenido de sus composiciones no demuestra ni crítica juiciosa, ni exige pensar, y un artista que se autoproclama rebelde y crítico que no exige pensar, ¿qué tan rebelde y crítico realmente es?
Dejémonos, entonces, de exaltar Calle 13 como referente musical contestatario e irreverente, que mucho hay que realmente lo son, y aceptemos simplemente que su música, sobre todo, por sus carácteristicas, es muy buena para salir y bailar, reirse un poco, entregarse al esparcimiento que es en ocasiones tan necesario (sólo en ocasiones), y tomemolo como lo que es: Música para bailar, festejar, reir, saltar, pasar una buena noche… al otro día, ya satisfechos, tomemos un libro y pensemos con seriedad.
angy
que triste ya cualquiera que habla pendejadas es musica; como es música si la escuchan, pero si protestan por otras cosas todos nos hacemos los oidos sordos…porque se recibe y se aplica más facil lo malo que lo bueno…pero asi es, deberian premiar y tambien dar gramy por otras cosas buenas que la gente haga por este mundo…para eso si no hay plata ni voluntad.
roberto dager
calle 13 es la ignorancia y el mal gusto que supuestamente denominan musica.
Francisco (colombia)
Es la primera vez que veo esta revista y no me parece un buen articulo, no me da buena impresion ni se que tan relevante sea tu publicación ni tus intenciones respecto a «Cultura Critica» en el périodismo digital(si bien q tonto es creerle todo a internet).
Y si que esperabas de calle 13? ¿una revolución que reivindica la justicia social?, son solo cantantes y ademas cantantes famosos, hacen parte de las terribles industrias culturales del medio asi que más no pueden hacer.
Me preocupa un poco que el Periodiscmo como dices tu que haces, crea que por publicar algo uede inducir o no a los lectores a un comprtamiento (escuchar o no calle 13, o matar a alguien por razones politicas-extremo-)te falta un poco de etica profesional creo q se llama y pensar que tan importante son tus palabras para generar un espacio de critica cultural.
Tema ABURRIDO,razones Absurdas, criterio Subjetivo.
Con el animo de que esta revista Replique más pensamientos vanidosos en internet, y que se aprovechen los espacios de discución con temas que realmente se enfoquen en el meollo de las situaciones sociales, un saludo.
Juan
Me identifico plenamente con el señor Joaquín. Calle 13 es otra figura política más, tratando de llamar no se a qué, haciéndole creer a la gente que una «revolución» es salir a insultar a todo lo que huela a Estados Unidos. Bah…ni me voy a desgastar opinando sobre estos señores.
Joaquín Peón Iñiguez
Esta columna la publiqué originalmente en mayo, no lo había releído desde entonces y no tenía planeado volver a comentar, sin embargo, hoy hice algunas modificaciones y aprovecho la ocasión para aclarar un par de asuntos. Los cambios los hice porque es mi texto y es una de las permisividades de una publicación digital. Ninguna afecta el sentido del texto, la sustancia. Apenas borré algunas de las comparaciones (por ejemplo, con Tom Waits o los Beatie Boys) porque es cierto lo que algunos manifiestan: estaban forzadas, fuera de lugar y colaboraban con ese tono pedante que a muchos enfadó. Sólo eliminé eso y un par de líneas más.
Imposible responder a todos los comentarios, sobre todo porque la mayoría son incapaces de debatir una idea y me insultan personalmente. Han habido muchos que en su afán de debatir terminan por reafirmar lo que se explicita en el texto. Muchos más no leyeron o leyeron un par de párrafos o leyeron lo que querían entender. Se han hecho acusaciones falsas y absurdas de todo tipo, llegando inclusive al ridículo de las teorías de conspiración, afirmando, por ejemplo, que algún gobierno me pagó por escribir esto. La mayoría de los argumentos, cuando los hay, son escuálidos o incoherentes, por ejemplo, aquellos que se quejan porque es un análisis subjetivo. ¡De eso se trata el ensayo literario desde el día en que lo inventó Montaigne! Está claro que esa no era la intención.
También creo que muchos condicionaron su lectura al título. Por mí que cada quién escuche lo que quiera. Lo único que digo es que hay que darnos la oportunidad de elegir entre la infinidad de opciones que hoy tenemos a nuestro alcance. Estoy seguro que muchos lo hacen y muchos otros sólo toman lo primero que les llega por los medios, es decir, Calle 13.
Por otro lado, también me he topado con una veintena de críticas que considero atinadas. Ya hablé de las comparaciones gratuitas. También es cierto que hay algunas líneas demasiado iracundas que no aportan mucho. Tienen razón, me olvidé de darle algunos puntos a favor al grupo y de darle su merecido espacio a la música, no sólo a las letras.
Y sí, la industria de la música devora y mercadea a su manera a cualquier ícono global, no sólo a Calle 13, también cabría en este concepto bandas como Nirvana o artistas como Dylan.
Aprecio particularmente aquellos pocos que se percataron que Calle 13 es el hilo conductor del ensayo, pero que se están tratando muchos otros temas tangenciales y sobre todo, cómo funciona el marketing en la industria musical.
También les cuento que después de esta experiencia, y ya han pasado siete meses desde que se publicó, he dejado de escribir ensayos críticos. No porqué dejara de crear en la necesidad de la crítica, sino porque espero madurar, acumular otras lecturas y que el trabajo diario en la escritura me permita crear ensayos que generen esta clase de debate, sin tener que caer en un tono tan agresivo, que se sostenga por el peso mismo de las ideas esbozadas.
Con esto me despido. Ojalá que a partir de ahora, más gente responda con argumentos y no con juicios vacíos o insultos coléricos.
Gracias a todos por leer
wentidos
espero que Joaquín Peón Iñiguez no viva de esto.
«Organizar el pesimismo no es otra cosa que transportar fuera de la política a la metáfora moral y descubrir en el ámbito de la acción política el ámbito de las imágenes.» WALTER BENJAMIN (1929)
Juan D
Personalmente creo que es un excelente artículo, se analizan los entes que tienen impacto en la sociedad y la manera que lo están haciendo, son figuras públicas que se exponen al análisis de todos, este articulo es tan solo una muestra de la libertad de expresión igual que ese grupo la tiene, la pregunta es cómo se está haciendo uso de esa libertad y si estamos causando daño o beneficio desde algún punto de vista.
Este artículo expone un punto de vista para mi bueno por otro lado el grupo a través de toda una maquinaria comercial no expone sino que impone una idea falsa de lo que dice ser, ridiculizando el vocablo, la mujer y la cultura como tal y demostrando que debe recurrir a esa ridiculización en aras de poder alcanzar el éxito, lo cual resulta más pensado y estructurado, como una plan no como un arte verdadero y espontaneo.
Si queda de alguna manera expuesta una sensación de ataque al grupo, no es más que una exposición basada en hechos reales que son demostrables a través de la pobreza artística en las letras de sus canciones la rebelión se lleva en por dentro, no se fabrica como un objeto para exhibir y confundir o engañar.
Felicitaciones al autor del artículo
Linapary
Flojo… No me gusta eminen ni calle 13 a los dos los escucho ocasionalmente y leí la primera razón y me aburrí.
BUTUMBABA
Dejen tranquilos a los artistas, que nos hacen soñar, nos hacen viajar por mundos, nos enseñan cultura.
Cada uno a su manera, si bien sabemos que en el rock business la rebeldia «paga», y quizas lo usen a su favor..esta en el publico poder creer o no, y cambiar de disco.
No es reggaeton, el reggaton es una base llamada dem bow, con bachata y rap.. Calle 13 hace mucho mas que eso.
No defiendo a Calle 13, defiendo a que dejen a los artistas hacer musica, estamos cansados de los criticos destructivos.
Protesta con Propuesta diria un amigo.
Saludos
Giancarlo
Este columnista Joaquin León escribe con resentimiento, mezcla una interpretación al pie de la letra (no entiende metáforas), confunde provocaciones marginales con observacion social de la realidad y se cierra defendiendo morales y principios… simples construcciones sociales.
Sol
la verdad con ese título y la introducción me esperé algo, pero resultó ser muy pobre, no encontré ni un motivo para no escuchar calle 13. Creo que si algo no me gusta pues ya, entre gustos no hay disgustos, más no tengo por que criticar de forma burda y sin respeto algo que no me agrade…
Kroyuela
Después de leer el artículo, siendo «defensora» del lenguaje por enseñar lenguas y gustándome calle 13, tengo que decir que lo que el autor denuncia no es nuevo, la música es una industria, eso ya se sabe, así que la crítica no es sólo para Calle 13 también para el resto de músicos, ahí se fue perdiendo un poquito, porque al hablar de mediatizarnos, !pues!, no sé que espectáculo posmoderno no busca el instante, el ahora, el ya por el ya ( y no lo digo yo, véase «la modernidad líquida») por otra parte, se le olvidó que con el lenguaje también se juega, que ninguna regla gramatical, ni estilística está por encima del uso mismo, aunque contra todas sus muchas quejas en este aspecto, sólo hace unas semanas analicé una letra de Calle 13 a petición de mi profesor de Procesos Lecto-escriturales y ¿Qué creen? la mayoría de las oraciones de esa canción tenían lógica gramatical. Y sí, tienen versos tan malos como los que citó el autor, pero también presentan algunos que vale la pena escuchar
» Hay poca educación, hay muchos cartuchos
Cuando se lee poco, se dipara mucho»
«El diálogo destruye cualquier situación macabra
Antes de usar balas, diparo con palabras»
Así que, en conclusión, las tales razones para no escuchar Calle 13 son las mismas que podría utilizar cualquiera para criticar cualquier otro artista de «La dictadura musical».
Bochica
Demasiado análisis y resentimiento.
Yo podría escribir larguísimos mensajes argumentando 10 motivos por los cuales no estoy de acuerdo con este artículo pero caería en lo mismo.
Hoy Calle 13 dará un concierto gratis en Bogota (eso resume muchas cosas). Todos quisiéramos que nuestro discurso sea escuchado por miles y todos seriamos felices con algo más de dinero y muy pocos (que aunque los hay) usarían esos millones en enseñar a pescar, no a dar el pescado. El que no se alegre por alguien que logre eso expresa una muy natural emoción: Envidia. (tranquilos es normal la frustración de quien no entiende que el arte no tiene cánones o dogmas y para Sinatra por ejemplo el rock era una moda pasajera de mal gusto y las líricas de sus letras eran como cambiarse de medias.
Por supuesto muchos seguidores de Calle 13 son borregos, pero no por René sino porque son borregos per sé y se sienten cómodos así. No es por compararlos con los Beatles pero hubo muchísima masa de Beatlemania y unos pocos entendían el mensaje de canciones como «Revolution». No me extiendo más.
massiel76
PARA LOS QUE QUIEREN SABER Q ES BASURA DE VERDAD ,ESTA DE MODA EN USA, AQUI POR WASHINGTON DC LO ESCUCHAN A TODO VOLUMEN Y ME ESTARIA RARO Q HASTA LOS SECURITY DE OBAMA LO TENGAN EN SU IPOD MIENTRAS CHAMBEAN, SI COMPARAN BASURA Q PARA CALLE 13 NO LO ES, DE TODOS MODOS SERIA UN NENE DE TETA.
http://www.youtube.com/watch?v=pn1VGytzXus
POR ESO DIGO AL QUE HIZO ESTE BLOG, TANTO SE LLORA POR UN PAR DE CARAJOS , CUIDAO Q CON ESTO LE DE UN INFARTO ,JAJAJJAA
Camilo
Excelente articulo. Calle 13 es basura. De lo peor que ha surgido en el siglo 21.
Espetro
Con todo respeto, creo que de la misma manera que despliega su conocimiento acerca de los personajes que menciona, también debería hacerlo desde lo musical, pues este grupo no hace reggaetón. Bonito o feo, Calle 13 es una expresión latina genuina y propia, creo que para mi como sudaca, vale más qué lo que piense Eminem, del que es pretencioso hasta su nombre perfumado de nobleza.
Saludos.
yava
ASI ES ES BUENO OIR CRITICAS. ES MUY PERSONAL
LE FALTO CARACTER MUSICAL ESO A APORTADO LOS 13.
ES ACERTADO A VECES; EN DEFINICION TODO SE VALE
HASTA LA CRITICA ES BUENA SI SE HACE CON CONCIENCIA:
Nati Ariza
Se quedó corto el artículo… lo que hiciste fue dar a conocer que realmente odias la banda y no más… a pesar de que tenias datos y comparaciones, para hacer la «crítica»… le faltó mucho más. es mas bien como aburridor y nada convincente… sin ser fan de Residente Calle 13, prefiero seguir escuchando su música sin problemas ni objeciones…
JHONELIO
MIS RESPETOS PARA TOD@S …SOY CANTANTE DE HIPHOP,Y MAS ALLA DE QUE SI ME PARESCA O NO EL ARTICULO (QUE TIENE COSAS INTERESANTES) Y AUN MAS ALLA DE QUE ME GUSTE O NO CALLE TRECE (ALGUNAS DE SUS CANCIONES ME PARECEN MUY BUENAS) ME PARECE QUE SI CALLE TRECE ESTA MUY EN CONTRA DEL SISTEMA,Y EN MODO RADICAL,SUCEDERIAN DOS COSAS: 1-NO LO DEJARAN SER PREMIADO EN ESTADOS UNIDOS Y 2-EL MISMO NO RECIBIERA UN GRAMMY Y SE LOS MANDARA A METER POR DONDE LES QUEPA. PERO NO ESTA EL,NI EL IMPERIO,NI EL AUTOR DE ESTE ARTICULO PARA DISCUTIRLO. RESPETOS A TOD@S NUEVAMENTE …
Juan Pablo
Bastante pretencioso el artículo, pero muy acertado. Hace rato me inquieta el asunto del consumo alrededor de la música, y de cómo nos volvemos masa para los artistas, y definimos inclusive nuestros roles, formas de vestir y comportamientos alrededor de la música que, por alguna razón, decidimos consumir. Acertado el comentario, y acertada la crítica, musicalmente Calle 13 hace rato se está repitiendo, ha tenido algunos aciertos, no todo es irremediablemente malo, pero vale la pena la crítica y el análisis.
Juan Peñalver
Coño, creo que este tipo que escribió este artículo pudiese caer en la misma situación de los «líderes» de izquierda venezolanos que por su dogmatismo se quedaron pegados y hoy están abiertamente en la derecha. Facilmente este señor escribiría un artículo diciendo que Chávez no es un revolucionario porque viene de ser militar y jefe de batallones antiguerrilleros o no se que alguna otra pendejada. Es más iniciando ya se cae con su prepotencia diciendo que calle 13 canta es reggetón y eso no lo discute. Por supuesto que no se trata de ser un «Fan» de René Pérez o calle 13, se trata de escuchar, de ver, de saber, en que andan, que hacen, en que se mueven. El compañero del artículo hace comparaciones equivocadas, casi que pudiese decir que una manzana y una mandarina son exactamente iguales porque son frutas. Porsupuesto que como dije antes, no es una cuestión de ser «Fan» hay que ser crítico con lo que se tenga que criticar, hace unos meses ante un «tweet» de René Pérez hice una Carta pública, poniendo lo que sentía (http://www.facebook.com/note.php?note_id=10150171167477581), hice la crítica, y hoy si me tocara discutirlo con él lo discutiría, he tenido conversaciones con gente incluso del MRC13 sobre algunas actitudes de René Pérez, pero hay que darse cuenta, hacia donde es el viraje de la agrupación? por qué no están firmados ahorita con alguna disquera? si quieren hacer plata, por que el contenido de sus canciones? que además ya en este último disco son varias las que ponen en el tapete temas sociales sensibles. Este señor articulista hace comparaciones con Eminem por ejemplo, quién ha visto a eminem hablando de los obreros o luchando por alguna causa social?. Si creo que la industria de la música y la mass media controlan un montón de vainas, pero no lo controlan todo… Creo que la discusión sobre Calle 13 está abierta, por supuesto, está abierta además sobre cualquier tema. No soy defensor a ultranza de calle 13 ni un Fan Enamorado ni nada de esa vaina, tengo mis observaciones con ellos, pero si creo que están haciendo lo que muchos no han hecho, están haciendo lo que muchos que tenemos incluso al lado no hacen. No me extrañaría que este autor sea uno de esos tipos que solo se dedican a escribir pendejadas las cuales las piensan por hooooras y horooooras, y no están vinculados a un coño para transformar la realidad. (Pausa de 20 minutos, fuí a revisar sobre el autor un poquito) Pues mira, el autor, como acabo de decir, es uno de esos ¡me quejo de todo! además coeditor de un medio digital «crítico» (Tan Crítico como Globovisión), en el cual hay, por lo que vi por encima, varios artículos de derecha, en uno incluso, una autora, dice que Chávez es (…»el paradigma de la imbecilidad de esta izquierda dogmática…)(https://revistareplicante.com/apuntes-y-cronicas/la-izquierda-lunatica/) en este mismo artículo, mencionan a Estados Unidos e Israel como las democracias más sólidas…. jajajaja! no jodas! Mira, no será que el tipo es de la CIA, al igual que el medio digital del que es coeditor, que de ñapa, está cargaaaado de publicidad de google… y entonces sale hablando de Calle 13 un poco de bolsadas… Coño la gente que habla paja y no hace, no transforma, espera a que llegue la revolución sin hacer nada para que llegue… me hacen recordar a los mencheviques y su concepción de la revolución. (OTra pausa de una hora) me bajé el audio de uno de los programas que hace este autor, se llama Resonante y el capítulo «El régimen Chavista» (pueden descargarlo acá para que lo escuhen https://revistareplicante.com/resonante/resonante-20-el-regimen-chavista/) no me pelé en lo que dije arriba… y ya me imagino el resto de los artículos y audios de la página…
Los cosmos
esta muy chevere el conjunto de palabras,pero no su expresion para empezar estamos hablando de criticas de una persona(sea quien sea), para mi esa es la primera ley de la vida como lo dijo jesucristo no juzgar (con la misma bara que mides seras medido) estamos yendo a la critica, que yo sepa el hombre esta mas concientes de las cosas, uno como persona puede elegir su artista que quiera. Lo que se diga o se haga en el globo musical eso es de cada quien.
y si tu eres una persona que tiene esos pensamientos de conbatir las cosas disque malas, para mi es un artista de protesta (protestar por las cosas) hay una cancion que se llama PAL NORTE o en esta cancion esta cantando por la emigracion, osea por la gente que tiene el mismo coraje de cruzar esa maldita frontera y arriesgando tu vida para ese tipo de gente es a que las canta, o VAMOS A PORTARNOS MAL no veo donde el esta criticando, sabes mas bien uno deberia tener ese coraje de prostestante, la verdad la gente que se esta quejando hoy en dia en vez de escucharnos los hijueputas diputados nos mandan a que nos metan presos, yo creo que hay que agredecir a un tipo como el que tiene huevos para entrarle y hablar lo que el siente hablar mismo.
A.Sosa
Tenias tanta informacion que te confundiste en lo que estabas diciendo,tu critica paso de ser algo interesante y con buenos argumentos,a un monton de resentimientos contra un grupo musical que simplemente muestran que no eres tolerante con lo que no te gusta,esta bien son tus argumentos y tus pensamientos pero de verdad crees que toda la musica esta tan bien hecha..Por que si vas a criticar la musica como un escritor creo que te equivocas de una gran manera,sencillamente no va al caso,no tiene sentido hacerlo,es como estudiar una profesion y desempeñar otra.Estas tan acertado en tantas cosas que te equivocaste en muchas mas.Son tus razones,muchos otros piensan muy distinto a vos y simplemente les gusta..
DAVID
A mi no me importa el tipo de música que haga, lo que si me duele es que se aproveche de las clases explotadas para vender y enriquecerse.
Si le importa simplemente el pueblo y plasmar ideas reivindicativas, haría como muchos grupos punk o independientes, hacen su música la difunden sin obtener beneficios económicos, sin pertenecer a grandes disqueras, sin pactar con empresarios. Creo que Calle 13 contradice sus «líricas rebeldes» con sus bolsillos llenos de dólares.
david
Me cansé de leer a la mitad. El autor no hace sino basarse en sus gustos y pensamientos para generalizarlos, como si todos pensáramos igual. Además olvida que está hablando de música popular; seguramente, con el manejo de lenguaje que tiene, no es necesario explicarle que esa música solo tiene como finalidad la gente del común; no requiere intelectualidad ni conocimiento para ser escuchada. No soy seguidor de Calle 13, pero tampoco me molesta su existencia; lo que no soporto es a alguien creyéndose lo suficientemente importante para decirle a la gente que debe o no debe hacer. Yo estoy haciendo mi grado en música, mas no por eso le digo a la gente que escucha Violadores del Verso, Beastie Boys, Leonard Cohen o Tom Waits (TAMBIÉN MÚSICA POPULAR) que no saben nada y que escuchan mala música porque no es música erudita, que no tiene ningún sentido mas que satisfacer oídos comunes, como los del autor. EN CUESTIÓN DE GUSTOS NO HAY JUECES.
orlando gonzalez
Un analisis serio y muy bien pensado. Soy puertorriquenho y valido lo que expone el autor. Siempre lo he dicho. Calle 13 es la Madonna Puertorriquenha que ha sabido inventarse y reinventarse y sobre todo venderse bien. Tiene el intelecto y la manha pero ciertamente no el valor social que vende a todos.
Yamila S. Canale Gagianno
Para empezar, te equivocas de lleno si crees que calle 13 es solo reggaeton. Calle 13 es muchisimo más que eso, es musica social, hecha para concientizar, con multiples generos. La verdad no entiendo porque criticar a una banda como Calle 13 habiendo tanto y tantos que criticar. Calle 13 no es perfecto, tendra miles de contradicciones, errores y todo lo que quiera este articulo, ¿quien no los tiene?, el ser humano es eso puro error, pura contradiccion, la musica no tiene porque quedar fuera de esto, si esta hecha por hombres. A pesar de eso, lo INTERESANTE,lo BUENO de Calle 13 y sobre todo lo que es INFINITAMENTE VALIOSO es el querer concientizar, el querer abrirle los ojos a la gente, es su busquedad por una LATINOAMERICA UNIDA, eso es lo que pide y le interesa, q los latinos abramos los ojos y entendamos que somos lo mismo y tenemos que estar unidos… ¿Ese mensaje es malo? bajo ningun punto de vista la union puede ser mala, ¿le molesta? y ahi hago otra pregunta: ¿a quien? Pareciera que a alguien le molesta, eso da la sensacion este articulo.
Luego habla de cosas con solo intenciones claras de pegarle a Calle 13, que no tienen nada que ver.. por ej: la procedencia de Calle 13…no nacio en la marginalidad, nacio de un padre abogado y no se q mas… eso esta mal?, eso le impide sentir el dolor del otro?, querer dar mensajes esclarecedores?, rebelarse contra la realidad de este mundo?.. solo porque el no nacio sin nada, no signifca que no pueda ver las injusticias. Jamas se me ocurriria criticar a alguien que quiere dar un mensaje tan bueno ..y menos con comparaciones, en fin … para gustos colores, CALLE 13 SEGUIRA BRILLANDO, RENE SEGUIRA BRILLANDO por ser un hombre sobre todas las cosas humano e inteligente.. VIVA LATINOAMERICA LIBRE, VIVA PUERTO RICO LIBRE!!! salu2
Barbara Palacios
Tres palabras que debes aprender: posmodernidad, foucault y niezsche.
MAC
Estás juzgando a alguien con unas reglas que éste no desea cumplir. Lo comparas con un escritor? Seguro Rene desea escribir mejor que un escritor…
Nare
Tu articulo pasa de ser interesante, solo en el inicio, a ser molesto y aburridor, y no molesto porque se sea fan o no de Calle 13 y sus letras, si no porque no es objetivo no se ven desde dos caras, obviamente eres una persona que odia el Reggaeton pero para hacer un articulo no solo se debe dar una critica constructiva y objetiva si no también un punto de vista convincente. Al leer el articulo solo me dejas un sabor de alguien que odia el genero y obviamente a Calle 13, por otro lado, no es mi animo el defenderlos o no , pero es importante ver las dos caras de la moneda para decidirse.
Que lastima que tantos datos se boten , porque no es de tu agrado algo, y es algo que debes dejar de lado al momento de escribir. Supongo que no es la primera vez que escribes , pero este en especial me hace sentir que leo a cualquier niño de 15 años que odia el regaeton y a calle 13.Sin mencionar como tal las criticas que les haces…
Daniel
Muy bueno, no solo tiene argumentos sólidos, sino que los ejemplos citados son pertinentes y acertados, además el análisis semiótico y gramatical hecho es muestra de que se tomo su tiempo, investigo y además de ser una critica constructiva y fuera de todo tipo de violencia o insulto contra la agrupación o el género, deja claro que este tipo de intertextos están presentes en más géneros musicales y no solo en los cantantes de reggeaton. Si quieren escuchar géneros rebeldes escuchen Punk, Hardcore, trash, música protesta y demás géneros barriales y auto-gestionados que por lo menos tienen alguna muestra contra-cultural en sus líricas.
Alejandro Boyer
Es evidente que cualquiera que sea el cantante o el cantautor y cual sea el género y el estilo que este ó estos interpreten, se hace necesario hacer siempre un análisis del mismo de su canto, su letra, su ideología; cuales son sus sentimientos y su sensibilidad humana. sin embargo en este caso vale la pena hacerse una preguntas. ¿A quién defiende quien redacta este artículo?, ¿Cómo comparar calle 13 con Eminen? ¿Es que acaso Eminen en su letra y música plantea su lucha por los pobres de Estados unidos por los más débiles del Mundo?. Este artículo pareciera que forma parte de aquel grupo de personas que luchan a favor de la hegemonía de las grandes trasnacionales y en contra de Latinoamérica, el Caribe y lo más débiles del planeta, porque independientemente que calle 13 tenga defectos es claro su mensaje reivindicador de las luchas históricas de los pueblos oprimidos, más aún cuando sabemos que la música es una de las formas alienantes por medio de la cual los grandes centros de poder han logrado sembrar en los niños, jóvenes, hombres y mujeres en general el pensamiento dominante del capitalismo y el consumo, que ha servido la música para dominar a las grandes masas para transculturizar a los pueblos e incluso para destruir culturas enteras como sus idiomas, entonces como es que no podemos utilizar la música como herramienta cultural para enaltecer nuestros dignos y grandes valores Latinoamericanos Caribeños, para sembrar conciencia en cuanto la necesidad de recuperar nuestra dignidad como pueblos libres y soberanos. Romper de una vez por todas con las cadenas de dominación que por más de 500 años nos apresan. Ahora cual es el temor hacia la música que siembra conciencia cual es el temor hacia la música de protesta, aquí en Venezuela tuvimos y sus canciones y letras palpitan en el corazón de la mayoría del pueblo luchador de nuestra patria como fue y lo sigue siendo ese gran venezolano Alí Primera él tampoco era perfecto pero nunca tendremos dudas de su entrega en la lucha por la dignidad de nuestra patria. Y eso mi pregunta a ¿A quién defiende este artículo?, ¿será que le duele que un grupo musical le esté roncando al león en su propia guarida? ¿Será que está en contra de la unión Latinoamericana Caribeña? ¿Será que es otro PETEYANQUI? Esas son las preguntas que nos debemos hacer sobre este artículo, puesto que todos sabemos que Calle 13 no es un grupo perfecto y tendrá sus errores pero es innegable su lucha por los más débiles de nuestros pueblos Latinoamericanos y Caribeños. ! QUE VIVA LA MÚSICA QUE SIEMBRA CONCIENCIA!!QUE VIVVA LA MÚSICA DE PROTESTA! es más aunque no canto y bailo ahora me voy a meter a escritor de música de conciencia y de protesta.
Hell Teacher
Excelente artículo. Me llena de esperanza leer a alguien que por fin puede ver la basura que es Calle 13.
Claudia
Yo estoy asombrada de toda producción racional alrededor de Calle 13, admirable en verdad. Las referencias la longitud y todo. Pero noto sobre todo una ausencia de emoción, que creo es lo mejor (si no lo primordial) que produce la música, cualquiera que sea. Incluso el repudio que destila esta nota es producto de la racionalidad. Así me apena que lo mejor de la música, su caracter emotivo, este relegado al punto de estar ausente totalmente en tu análisis. Y con eso no tengo 10 razones pero sí una emoción, y eso me huele a empate.
Juan Pablo Pozo
Está interesante el enlace, me parece que está sesgado por la trasferencia de quien escribe con calle 13, se refleja esto al «dar por sentado que es reggueton»,¿pero quién no?, tambien no toma en cuenta el último disco, si tomas como ejemplo los beatles son un grupo y luego otro después del disco blanco, me parece que calle 13 está haciendo un giro hacia algo nuevo para ellos. Concuerdo con el autor en que en gran parte las letras del grupo se basan en la queja y en la promesa, también concierdo con que calle 13 tiene varias posturas ante la iglesia. Me parece corecto lo que acota el autor con respecto a ese posicionamiento de calle 13 que parecería que se escapa a la falta. No concuerdo con el autor en que menosprecie la importancia de la imagen, roqueros como blondie, ramones, iggy pop, sex pistols, the dolls daban cuenta de la importancia de la imagen, sino la frase célebre del César, no basta con ser el César sino que hay que parecer el César.
CAFIRRR
este tipito y sus seguidores dicen que sus letras son muy sociales y un monton de barrabasadas mas a mi me parece un sinplon con ganas de figurar vender y hacer de sus seguidores unos estupidos a su imagen
y tambien creo que un articulo tan largo sobrevalora el «trabajo» (cosa que no creo) y le da mucha importancia a un genero tan despreciable como lo es el regueton
Mam
Creo que cada quien disfrutará de la música que le plazca, pues para ello existe variedad, no es mi grupo favorito, me da igual, puede que a mucha gente le moleste la posición de René de querer autodenominarse rebelde con causa y que pasa por encima de los esquemas y demás, pero pues el que le quiera creer, pues es su problema.
Lo que si no me parece es que siquiera pueda pensarse en comparar a REné con Eminem!!! por favooor!!!! Eso si me parece fuera de todos los cabales, no tienen nada de parecido y Eminem está lejos de ser el mero producto de un mercado, por lo menos su identidad está bastamente definida.
Luna
no estoy de acuerdo con NADA de lo que aquí dicen. Acaso no han pensado que calle 13 es también letras SIN sentido y que lo hacen intencionalmente. No se tomó el trabajo de escuchar lo que dice en un concierto que nada de Incoherente tiene? Esta gente mediante sus vivencias logra plasmar en canciones como CALMA PUEBLO, LATINOAMÉRICA entre otras.. sentimientos que ningún otro artista logra.
A mi de qué me sirve que Eminem refleje odio verdadero, no me aporta en nada, por lo menos éste man promueve la rebeldía con argumentos algo absurdos, pero esta ahí para detonar, para causar controversia, para hacer despertar la gente. Hay grandes artistas que no cantan por él para darle fama, sino porque en realidad creen en su proyecto. Y si no siente nada de música con éste video, no tengo idea de qué lo sea a propósito: soy música y les dejo.. http://www.youtube.com/watch?v=ssxM5sJAB1c&feature=related
Reincidente
Está muuuy claro que Calle 13 es un grupo bastante controversial, prueba de ello es éste artículo que si bien es crítico y se nota que hicieron un EXHAUSTIVO estudio de composición, letra, biografía y música en general. Pero mucho de lo que aquí se enuncia es también con el fin de denigrar la banda.
Hay que ser críticos, claro. Más aún cuando uno no esta de acuerdo con algo, pero por mas que se quiera llegar a mostrar todo un panorama para «no escuchar la música de calle 13», no es posible -NO ES POSIBLE- olvidar tanta fuerza que ha adquirido el grupo y que ahora sus canciones gústele a quien el guste SON y seguirán siendo himno. Me gusta calle 13 pero amor no quita conocimiento, de acá concuerdo con muchas cosas de las que hablan pero noto también cierto resentimiento absurdo que al final no sirve de nada.. Ah si, para darles mas fama. Saludos desde Medellín, Colombia. ;)
richard
De acuerdo en mucho de lo que dices. Para mi son poseros y si algunos intelectuales estan con ellos es porque es politicamente correcto. Nada mas.
Richard
INTERMEDIO---J.I.A.R
Todos tenemos derechos a expresarnos, Si el es ateo, Bién pues es su vida, el decide, Si no te gusta, bién pues Aquí arriba esta tu post, Pero hay algo, No puedes hablar así de el como si estuviera cometiendo delitos, No está matando, No está robando, No esta violando, No esta haciendole daño a nadie, si crees que su música te hace daño, pues no lo escuhes para eso hay off en radios, si estás en la calle y lo escuchas aléjate, pues si no quieres ese ya es TU problema, Sí es tu problema que seas resentido, Y TU problema que no te guste
INTERMEDIO---J.I.A.R
Mira, Muchas de las cosas son verdad, como muchas no, Por ejemplo; Que es Vulgar, es cierto, Que muchas veces redacta mal y que algunas de las letras de sus canciones están mal escritas, Que dice tonterías, que Yo no soy como el y que el no es como yo, porque no tengo 50 millones de dolares, En sus conciertos dice que el la música de los pobres, pero en realidad no lo es porque un pobre no puede pagar 20,50 o 100$ para entrar, pero también, quiero que me digan que es mejor, Daddy yankee o Calle 13, Wisin y Yandel o Calle 13, Tito el bambino o Calle 13, Metamos otros géneros de música. Que es mejor, Justin bieber o Calle 13, Calle 13 tiene de bueno que le importa mucho La cultura, La educación, El patriotismo y Que el que manda al país es el pueblo, Y eso está muy bién, A mí personalmente, Me gusta Calle 13, pero reconosco que varias cosas de lo que dice es mentira…Ahora, sobre este post, Tiene verdades pero tiene mentiras, y hay muchas partes exageradas de sobre manera como por ejemplo cuando se puso el trofeo de la lengua de MTV en la boca, No hay porque denigrar a las personas que les gusta vivir la vida, porque la vida solo es una.
alex
qeu buenas palabras las de ernesto! totalmente deacuerdo, hemos visto a shakira, calamaro, cafeta, mercedes sosa, y muchos artistas queriendo hacer una cancion con calle 13, sera qeu esto no dice nada?
Felipe Love
creo que hacer un análisis tan extenso sobrevalora a este Reggetonero!
Francisco García (Bogotá)
Esto parece escrito por alguien de 100 años, no deja de admirar e idolatrar viejas imágenes de rebeldía, alguien que no comprende que las cosas cambian que las cosas viejas al pasado, y lo nuevo es lo presente, quizás si esta muy mal hecho la supuesta venta de rebeldía que hace Calle 13 según este…texto.
Y entonces ¿Qué es un rebelde? ¿Cómo es un rebelde?
¿Rebelde el que cambia de género? Eso si da risa, Cambiar de géneros es como decir: «No se me ocurre más, no tengo creatividad haré lo mismo pero en otro género» además «clasificar» la música ha sido el peor error del humano, y por eso empiezan textos y discusiones inútiles como esta alrededor de la música.
«Music for all and not just one people».
Beastie Boys
Ernesto Barrera
Me parece que este articulo tiene un alto grado de resentimiento social, moral y artístico. Calle 13 es una de las mejores bandas de musica (de diversidad de géneros no de reggeton) aceptadas por las diferentes poblaciones y culturas en Latinoemarica y Europa.
La aceptación no es producto de la ignorancia sino, precisamente del buen saber de música y de mensaje social. Obviamente no es perfecto, es un artista comercial y debe de vender, pero eso si, es altamente mucho mejor que un sin fin de reggaetoneros, raperos y popero comerciales que no dicen nada en sus canciones.
Los resultados hablan mas que mil palabras, intelectuales, artistas de todo tipo, actores, pintores, comediantes, cantantes, políticos, pueblos y comunidades organizadas, medios de comunicacion, presidentes, Buena parte de los expertos en musica, etc, etc. Muchos le reconocen su talento y su exito, libremente de sus grammys, sus visitas en Youtube y seguidores en twitter.
Calle 13 es de los mejor que ha empezado a parir el siglo 21, le duela a quien le duela. Saludos.
Sergio
Mira cuando uno tiene mucha información se pierde la esencia.
Si tu eres botánico y miras un árbol, tu mente esta trabajando con
recopilar toda la información q tu conoces de q flia es, en q piso térmico se da etccccc. Es bueno; pero se pierde el disfrute de ver el paisaje, de sentarse bajo su sombra;
ah! y es de recordar q lo bueno es q hay q reconocer q todas las generaciones seran diferentes y a cada una la marcara un genero, musical una moda.
si realmente quisiéramos cambiar algo seguro q tendríamos mejor educación y un buen sistema de salud, donde no haya q mendigar una cita medica o rogar por un medicamento
Disfruta tu vida y no te pegues de cosas tan pequeñas, ya q hay cosas mas importantes en las q hay q pensar
ANTIBASURA
Yo no sé quien irreverentemente puede comparar esta basura de grupito con los Beatles,es como comparar a Hugo Chávez con Jesucristo,se exiem de toda l´ógica semejnate brutalidad,Calle13 no hace música ni bonita ni duradera,solo es una cloaca de inmundicia disfrazada de revolución.