Lunes después de que pasó lo que tenía que pasar: Argentina 3-1 México. Quería comprar El Gráfico, ese que salió con los rostros de los aficionados carnavalizados lloriqueando. Tres pesotes. El mai me ofreció El Universal —el choncho— por sólo cinco pesitos. A mitad de precio.
—Es que no se ha vendido —me dijo a eso del mediodía.
—No, mai. El Gráfico está bien —respondí rehusando tremenda oferta.
El Universal tiene un sobretiro los lunes respecto a otros días por una razón comercial: se vende por el aviso oportuno; lo compran los desempleados. Es decir, los desempleados no compraron ese día el periódico. Ese día no iban a ir a buscar trabajo. Estaban muy bajoneados, sin ánimo ni esperanza de hallar algo. No era un buen día. Javier Aguirre les falló. No pudo y no se pudo. Pero había asegurado lo contrario en calidad de rostro del Bicentenario. El entrenador del ya se pudo y el presidentito del empleo son iguales: estafadores de un país jodido.
El Vasco se va a Inglaterra, al parecer, donde el manager de Guille Franco ya está promoviendo a su hijo para que juegue allá. ¿A dónde se va a ir a vivir el presidentito del empleo cuando se cumpla su sexenio? ¿A Inglaterra, allá a donde mandó de embajador a su ex procurador? “Amo a México”, decía uno, y “pasión por México”, el otro. Ambos en la tele. Allá podrán brindar, en un país seguro y con un futbol de primer nivel.
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¿Qué esperaban? ¿Que ganaran? Osorio lo dijo muy claro después de ya saben qué. Que este año le había ido muy mal, que casi no había jugado. Es decir, que se la pasó en la banca en su equipo. Esto prueba que la cantidad de jugadores en ligas europeas no implica nada para una selección si no son titulares en sus equipos. Los que jugaron mejor fueron los que participan regularmente en sus equipos, como Chicharito en Chivas.
La internacionalización de jugadores es un fenómeno sumamente extendido. Honduras tiene a cuatro de sus seleccionados en ligas europeas. Inclusive hay jugadores de Jamaica o de Martinica que juegan en la segunda división en Inglaterra. Destaca el caso opuesto, el de Alemania, en el que la mayoría de sus jugadores participan en su liga federal.
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La afición mexicana es muy noble. Tiene a Brasil como “su” segundo equipo favorito para después de que pierden los “nuestros”. Y muy afortunada, porque ahora también tiene a España como “su” otro segundo favorito. Imposible que aficiones como la argentina o la brasileña puedan tener a “su” segundo favorito. ®
Pildorita de la Felicidad
Amén. Bien dicho, carajo.